El Partido Popular y Ciudadadanos finalmente han llegado al acuerdo. La formación liderada por Albert Rivera ha tenido que aflojar algunas de sus exigencias aunque también ha logrado algunas victorias.
Los de Rivera consideran que la amnistía fiscal de Rajoy ha sido demasiado permisiva con muchos defraudadores que esquivaron sus pagos a Hacienda. Estiman que el Fisco dejó de ingresar 2.800 millones de euros. El Partido Popular solo se ha comprometido a revisar los casos pero no a modificar su criterio.
En este toma y daca del PP con Ciudadanos se ha quedado fuera del texto definitivo el contrato único. Una renuncia que Rajoy ha compensado reduciendo a tres los tipos de contrato. Finalmente quedarían: los contratos temporales, los contratos indefinidos y el contrato de formación.
Además, ambas formaciones han acordado introducir en el pacto de investidura el complemento salarial, un subsidio para las rentas más bajas que en su momento Rivera ya pactó con Pedro Sánchez.
También se han puesto de acuerdo en igualar los permisos de paternidad y maternidad, aunque de forma progresiva por los costes. Recuperarán además el gasto por habitante anterior a la crisis en educación, sanidad o dependencia.
Según algunos medios, el pacto costaría unos 29.000 millones de euros.