José vive en 40 metros cuadrados, en los últimos dos años apenas ha trabajado tres meses, y la ayuda social de 426 euros le hace imposible hacer frente a la hipoteca de su casa. “Yo vivo gracias a mis padres”, ha declarado José Martín, ex escolta. josé trabajó diez años como escolta, protegiendo a cargos electos del PP y del PSE y a mujeres víctimas de violencia de género".
Como a él, después de años siendo la sombra de sus protegidos y en el punto de mira de ETA, el final del terrorismo ha dejado en la calle a muchos escoltas. Santiago Fontela, miembro de la Asociación de Escoltas Privados en País vasco y Navarra ha comentado:“Hemos pasado de 3500 escoltas a apenas 100 ahora”.
Por el camino se han quedado promesas de trabajo, en la vigilancia de cárceles, o protegiendo a mujeres maltratadas. “Me siento dolido porque se han olvidado de todo aquello”, ha declarado el ex escolta, josé Martín.
Tras seis años como escolta en Euskadi, Joao siguió el mismo camino: “Yo verificaba coches, vigilaba…”. En 2012 un ERE le dejó en paro: “Tras todo el trabajo que has hecho, te tiran por la puerta de atrás”.
Volver a encontrar trabajo se convirtió en misión casi imposible. “Entregué cerda de 2000 curriculums y tenía que ocultar mi pasado”, ha declarado João de Oliveira, ex escolta. Lo único que João ha encontrado es como portero en discotecas, pero aún así se siente afortunado.
Aunque lo que peor llevan es que hayan dejado caer en el olvido todo lo que hicieron.
Lo rechazó y siguió siendo colaborador
Maestre relata una reunión con Ábalos en la que le ofreció la dirección de comunicación de ENAIRE: "No respondí nunca"
"Decidí seguir haciendo lo que hago", dice Maestre, que rechazó el ofrecimiento de Ábalos y Koldo durante una reunión que mantuvieron en el Ministerio de Fomento.