Elvira Roca Barea
Editorial: Espasa
Año: 2023
Sinopsis: Nada más ser nombrado inquisidor, Alonso de Salazar es enviado a Navarra a investigar una sucesión de hechos fanáticos y violentos relacionados en principio con la brujería. Alonso, un hombre cabal, frío y extremadamente inteligente, le pide a su joven sobrino, Baltasar de Velasco, un jesuita en plena crisis de fe, que acuda a ayudarle en las pesquisas.
En seguida, Alonso se da cuenta de que más que conjuros y demonios, lo que sucede en las cuevas de Zugarramurdi, cerca de la frontera con Francia, es de una complejidad más profunda y humana. Y los atroces asesinatos que han atemorizado a las gentes de la zona tienen más que ver con los conflictos políticos y religiosos de la época, que con la magia negra.
Por qué recomendamos 'Las brujas y el inquisidor', de Elvira Roca Barea
Elvira Roca Barea es doctora en Literatura Medieval y se nota. Licenciada en Filología clásica y Filología Hispánica, su trabajo como escritora ha estado siempre más ligado al ensayo que a la novela, pero con 'Las brujas y el inquisidor' se adentra con éxito en este género: ha ganado el Premio Primavera de Novela 2023.
Esta historia, basada en la profunda investigación que ha realizado la autora, engancha. Utilizando las herramientas de la novela negra, Elvira roca Barea va desentrañando el suceso real ocurrido en 1609 en el pueblo navarro de Zugarramurdi como si de un caso policial se tratara.
Y para la figura del héroe investigador, tampoco ha tenido que inventar nada. La figura de Alonso de Salazar se alza aquí como un detective medieval, sagaz, calculador y lleno de sentido común, lejos de la leyenda negra que lo considera un fanático religioso.
Al final, lo que consigue 'Las brujas y el inquisidor', es introducir al lector en el oscuro mundo de principios del siglo XVII, en las herramientas con las que contaba la Inquisición para solucionar los casos a los que se enfrentaba y en trazar un luminoso perfil de Alonso de Salazar, cuya presión fue clave para dejar de considerar la brujería como un delito. Y todo ello, sin dejar de contar una historia tremendamente entretenida.