Guinness World Records 2025
Editorial: Planeta Junior
Año de publicación original: 2024
Hubo una época oscura en la que las discusiones de bar, más concretamente de pub, no podían ser saldadas a golpe de teléfono e internet. A la pregunta de cuál es la mayor escultura de queso o el mayor número de bebés nacido en un solo parto, solo quedaba el riguroso silencio de los parroquianos.
Sin embargo, los gemelos idénticos Ross y Norris McWhirter le pusieron fin a los años de oscurantismo, aprovecharon para promocionar cierta cerveza negra y de paso publicar su libro con tapas resistentes a la salpicadura del líquido elemento. Desde entonces las sucesivas ediciones del Guinness World Records se han convertido en bestsellers internacionales, aunando a la raza humana en torno a lo (oficialmente) asombroso.
Las ediciones de los Guinness World Records se han convertido en bestsellers internacionales
Desde las mismas estanterías donde se exponían los libros de texto, las tapas de estos recopilatorios de hazañas insólitas o asombrosas nos miraban con portadas brillantes y personajes imposibles. Recuerdo perfectamente hojear compulsivamente la edición que le regalaron en 2004 a mi primo. Nos pasamos horas mirando las fotografías, preguntándonos secretamente con qué habilidad podríamos formar parte del palmarés.
Guinness patrios
Por no dejar nada en el tintero, la figura de queso más grande del mundo pertenece a Sarah Kaufman, apodada La Dama del Queso y pesó una tonelada y media; y el mayor número de bebés nacido en un solo parto fue de nueve retoños en total, cinco niñas y cuatro niños. Como habrán podido adivinar, todos estos datos están presentes en esta última edición, la de 2025, una que se actualiza en nuestra era con algunos récords que nos tocan de cerca.
El comentarista y creador de contenido, Ibai Llanos, aparece entre sus páginas para firmar la retransmisión de Twitch con más espectadores del mundo: 3.442.725 millones de personas siguieron La Velada del Año. También nos encontramos a Christian López, el español con más récords a sus espaldas.
La edición de 2025 se actualiza con algunos récords que nos tocan de cerca
Desde uno donde está más tiempo con una silla en equilibrio sobre su barbilla (Una hora y 19 minutos), hasta los cincuenta metros con zapatos de tacón más rápidos (5,89 segundos).Pero también otros más atléticos. La atleta María Pérez rebajó 29 segundos el anterior récord de 35 kilómetros marcha, completando la distancia en dos horas, 37 minutos y 15 segundos.
Hay otros entregados a animales, como el salto de mayor altura de un conejillo de indias. La gesta corrió a cargo de Willow. Saltó 24 centímetros frente a los (solo) dos que ostentaba el plusmarquista anterior. También hay algunos que son fruto del esfuerzo colectivo, como el árbol de navidad de Vilamarxant, de 23,5 metros de altura y 10.000 cuadrados de ganchillo. Hecho enteramente de este material, se trata de la escultura de encaje más alta del mundo.
Del solomillo Wellington a lucha libre en salsa
Los Guinness ofrecen esa libertad maravillosa del asombro: Los 125.000 metros cuadrados de nieve artificial que se usó para grabar una única escena de la película de Ridley Scott, Napoleón, donde se simulaba el invierno ruso. O el mayor número de victorias en el Campeonato Mundial de lucha libre en salsa de carne: fueron seis veces. Es importante añadir que los púgiles combaten en salsa picante.
Lo asombroso no conoce fronteras ni estilos, todo cabe. En el mayor gesto democrático de los últimos setenta años, el GWR es el único libro donde toda disciplina cabe sin importar el género o el lugar de origen. El verdadero triunfo de la humanidad está en la capacidad de que todos podamos figurar en algún momento. Ya sea por crear el solomillo Wellington más grande del mundo (25,76kg), o por tener la uña más larga (138,94cm).