Tracy Wolff

Traducción: Pura Lisart y Roser Granell

Editorial: Planeta

Año de publicación original: 2023

Vivir interno en un colegio no tiene que ser fácil. Yo nunca lo he experimentado, pero mi padre sí y siempre le recuerdo hablar con amargura y con bastante inquina de aquellos años. Es cierto que no es una cárcel para niños pero, precisamente, para los que viven allí metidos puede que se les parezca bastante.

De un tiempo a esta parte tenemos obras de ficción que se han centrado mucho en eso de vivir en un internado. Y si los niños y adolescentes ya son difíciles de por sí, imaginad hacerlo con vampiros, hombres lobo o brujas. Pues esos, precisamente son los compañeros de Clementine, la protagonista de Dulce pesadilla, la novela con la que arranca la nueva serie de la superventas Tracy Wolff.

Un internado monstruoso

Esta adolescente tiene 17 años vive en la academia Calder, un lugar diseñado para jóvenes rebeldes de naturaleza paranormal. Todos aquellos que, además de tener una condición especial, se saltan las normas y tienen problemas con la autoridad y con cualquiera que se les cruce por delante.

Para colmo de males, la madre de Clementine es la directora de la academia. Así que lo tiene más difícil que cualquier otro alumno. Además de lidiar con la tiranía de su progenitora, tiene que soportar ser el punto de mira de la mayoría de los internos solo por llevar el mismo apellido que la que manda. Típico de cualquier entorno adolescente, vamos.

Su única esperanza es aliarse con el chico que más odia pero del que se va enamorando perdidamente

Pero lo malo no acaba aquí. Dulce pesadilla nos tiene reservadas más sorpresitas. Para empezar, una misteriosa tormenta azota la academia dejándola sin electricidad y provocando que todas y cada una de las pesadillas de los alumnos se vuelvan realidad. Encerrada en la academia, Clementine tendrá que aliarse con la persona que más odia de todo Calder para sobrevivir: un chico que le hace la vida imposible pero del que se va enamorando perdidamente cada día que pasa.

Tracy Wolff y el 'romantasy'

Tracy Wolff se ha convertido en un fenómeno junvenil. Solo en España tiene una legión de más de 350.000 jóvenes que devoran todo libro que llega a sus manos y esté firmado por ella. De hecho, en 2020 ya arrasó entre la generación Z con la saga Crave, una serie de que atesora ya seis entregas.

Ahora, con Dulce pesadilla inicia una nueva historia pero lo hace sin salir del mismo universo. Estamos ante un spin off de Crave. Vamos, que es de esperar que a lo largo de estas historias veamos a varios vampiros (los personajes principales de la serie Crave) pasarse por las páginas de la academia Calver, ya sea en forma de cameo o con roles más importantes. De momento, ni confirmamos ni desmentimos, pero hay que estar atentos porque sorpresas seguro que habrá.

Hay asesinatos muy violentos y muy explícitos, gore, sangre o acoso escolar entre otras muchas cosas

Wolff tiene en el romantasy su género fetiche. Traduciendo estos términos que tanto gustan a los angloparlantes, hablamos de romance juvenil mezclado con fantasía. Pero mucho cuidado porque que haya amor no significa que estemos delante de una novela amable.

La propia autora lo advierte bien claro al principio y al final de la novela: en Dulce pesadilla hay asesinatos muy violentos y muy explícitos, hay gore, sangre, acoso escolar y fobias. Por eso Wolff pide encarecidamente que cada uno lea su nuevo libro bajo su completa discreción. Eso sí, si entráis, ya no hay vuelta atrás. Estaréis más que enganchados. Estáis avisados.