Vicente Garrido

Editorial: Ariel

Fecha de publicación original: 2024

Hay jefes que son unos psicópatas. Hay amantes que son psicópatas. Incluso hay políticos que son psicópatas. No es que nos hayamos puesto tremendistas ni paranoicos. Imagina que estás en una cena con amigos o compañeros de trabajo. Todo parece normal, las conversaciones fluyen, las risas se multiplican y, de repente, te das cuenta de que hay una persona que siempre acapara la atención.

Es encantadora, sabe decir lo que la gente quiere oír, tiene una sonrisa perfecta y parece tener el control absoluto de todo lo que ocurre a su alrededor. Incluso puede que te caiga bien. Sin embargo, algo en su mirada o en su actitud te resulta un poco inquietante. No sabes bien por qué, pero hay algo que no encaja. Bienvenido al fascinante y escalofriante mundo de los psicópatas integrados.

Hay jefes que son unos psicópatas. Hay amantes que son psicópatas. Incluso hay políticos que son psicópatas

El ensayo de Vicente Garrido va mucho más allá de los estereotipos típicos que solemos asociar con los psicópatas.Olvídate de los asesinos en serie que vemos en las películas. Aquí no hay máscaras de hockey ni cadenas de sierras mecánicas.

Escondidos entre la población

Los psicópatas de los que se habla en este libro no tienen nada que ver con el crimen violento. De hecho, ni siquiera tienen que ser delincuentes. Son personas que, adaptadas a las normas sociales, ocultan una total falta de empatía, un ego desmesurado y una habilidad manipuladora que hace que puedan destrozar tu vida sin que te des cuenta.

A diferencia de los "tradicionales", los psicópatas integrados prosperan en nuestra sociedad

El autor, catedrático de Educación y Criminología, los llama psicópatas integrados porque, a diferencia de los psicópatas más "tradicionales", estos individuos han encontrado la forma de ser uno más en la sociedad, y lo que es más, prosperar en ella. Se integran en ambientes de trabajo, en grupos de amigos, en familias, y ahí es donde encuentran su campo de juego ideal.

Son carismáticos, encantadores, seductores, y parece que tienen una respuesta perfecta para todo. Pero, como un lobo disfrazado de cordero, sus verdaderos propósitos son mucho más oscuros.

Sin remordimientos

Uno de los puntos más interesantes de este libro es cómo Vicente Garrido explica que estos psicópatas son maestros en el arte del camuflaje social. Pueden ser el compañero de trabajo que parece tener siempre éxito sin esforzarse demasiado, el jefe que sabe cómo ganarse a todo el mundo pero que, en el fondo, está dispuesto a pisotear a quien sea para conseguir lo que quiere, o incluso la pareja que al principio parece el amor de tu vida, pero que poco a poco va destruyendo tu autoestima.

Lo bueno que tiene El psicópata integrado es que te da pautas y claves para reconocerlos y combatirlos. ¿Su principal característica? La falta de remordimientos. Estos tipos no sienten culpa por lo que hacen. Si se aprovechan de ti, si te manipulan, si te hacen daño, para ellos no es más que parte de un juego en el que, obviamente, ellos siempre ganan.

Su principal característica es la falta de remordimientos. No sienten culpa por lo que hacen

Ahora bien, lo que realmente da miedo de los psicópatas integrados no es solo que puedan engañarnos, sino que son mucho más comunes de lo que pensamos. Puede que ya haya uno en tu vida y no lo sepas. De hecho, el propio autor revela que según varios estudios y estimaciones, alrededor del 1% de la población se encuentra en el espectro alto de la psicopatía. Esto no significa que debamos ir por la vida desconfiando de todo el mundo, pero sí nos invita a estar atentos a ciertas señales de alerta.

Una sociedad a su medida

En el libro, Garrido también hace un análisis muy interesante sobre cómo la sociedad, en cierta medida, recompensa a los psicópatas integrados. En entornos competitivos como los negocios o la política, ser manipulador, insensible o tener una ambición desmedida a menudo no solo no se castiga, sino que se premia. Los psicópatas integrados saben jugar muy bien con esto, y por eso logran alcanzar posiciones de poder e influencia sin ser desenmascarados.

Al final, lo que nos queda es un análisis pormenorizado y muy fundamentado a cargo de un autor que, a lo largo de su carrera, ha publicado numerosos libros y estudios con un enfoque especial en la psicopatía, el perfil criminal y el tratamiento de jóvenes conflictivos. Entre sus obras más conocidas se encuentran Los hijos tiranos: El síndrome del emperador y Amores que matan, donde explora la violencia en las relaciones de pareja.

Para los psicópatas integrados no somos más que parte de un juego en el que ellos siempre ganan

No queremos que se os quede una impresión funesta tras haber leído esta reseña. No todos somos psicópatas potenciales. Salvo algunas excepciones, ningún ser humano está destinado a ser un psicópata. Se le puede rescatar si reciben un tratamiento adecuado antes de que se forme su personalidad definitiva.

Eso sí, después de terminarlo, os aseguramos que nunca volveréis a mirar de la misma forma a esa persona perfecta que siempre parece tener el control. Porque, en este juego, la verdadera victoria es no dejarse engañar.