La educación afectivo-sexual es la gran asignatura pendiente en España, más aún dentro del ámbito familiar: el 50% de los jóvenes no ha hablado nunca de sexo con sus padres/madres, según datos recientes del Colegio Oficial de la Psicología.

Hacerlo es fundamental porque ayuda a ver y a entender la sexualidad y las relaciones de una forma sana, respetuosa y sobre todo real, porque por desgracia,para muchos jóvenes, el porno se ha convertido en un referente educativo y cada vez se accede antes a él: entre los 9 y los 11 años.

A propósito del acceso y con el fin de evitar precisamente que los menores entren al contenido pornográfico en internet, esta misma semana hemos conocido el anuncio, por parte del ministro para la Transformación Digital y la Función Pública, José Luis Escrivá, del lanzamiento de la aplicación 'Cartera Digital Beta', disponible a partir de septiembre y será obligatoria para las páginas con sede en España (en este vídeo, todos detalles).

Por su lado, y a nivel educativo, los expertos abogan desde hace tiempo por la educación afectivo-sexual, tanto en las aulas como dentro de las familias. "Debemos ser valientes y considerar que la educación sexual que nuestros hijos/as reciban en casa es clave para su futuro", explica a laSexta.com José Luis García, Doctor en psicología, especialista en sexología y autor de '¿Hablemos de porno?' (Plataforma Actual), un libro que ayudará a los padres y madres a hablar de sexualidad y todo lo que conlleva con sus hijos/as.

Porque, tal como argumenta García, "el sexo es muy importante para la inmensa mayoría de las personas, niños y adultos, a lo largo de toda la vida. Todos los niños/as se hacen preguntas que, si no son respondidas de manera adecuada, en la familia y en la escuela, estos buscarán la respuesta fuera".

Todos los niños/as se hacen preguntas que, si no son respondidas de manera adecuada, en la familia y en la escuela, estos buscarán las respuestas fuera

José Luis García, doctora en Psicología y autor del libro ¿Hablemos de porno?

Y esto -añade García- es "una lamentable realidad que ha ocurrido en todas las generaciones. Nuestra sociedad no ha sido capaz de dar una respuesta saludable al aprendizaje de los hechos sexuales de los menores".

Sin embargo, debemos saber que "los niños/as escuchan a aquellos padres que atienden a sus demandas y ofrecen respuestas científicas y cercanas". Por ello, "los padres y madres tienen que saber que es necesario disponer de unos mínimos conocimientos, valores y habilidades para afrontar exitosamente los riesgos que tiene nuestra sociedad de pantallas y de acceso sin control a la pornografía violenta, si quieren que sus hijos/as tengan una salud sexual y afectiva razonablemente adecuada en el futuro".

Además, y como explicaba a laSexta en el artículo 'Cómo hablar de sexo con los hijos' la Dra. Francisca Molero, médica y sexóloga, "si las cosas no se hablan y se ocultan, generan mitos y desconfianza y ello te expone ante situaciones más vulnerables, porque sencillamente no se conoce y no se es capaz de comunicarse de manera asertiva".

Además, añadía también que "si los jóvenes tuvieran más información sobre todo lo referente a la sexualidad y a las relaciones afectivo-sexuales (no sólo lo referente a las medidas de protección), no tendrían la pornografía como modelo de referencia —o como uno de sus modelos de referencia— porque tendrían con qué comparar, porque sabrían que eso es sólo ficción y que no es la realidad de las relaciones".

El problema de la pornografía: los niños/as acceden cada vez antes

Desde el Colegio Oficial de la Psicología de Madrid señalan que el consumo abusivo de la pornografía es una de las problemáticas acuciantes en nuestro país.

"Son numerosos los estudios que asocian el aumento de su consumo a comportamientos abusivos en la pareja, aumento del sexismo y los estereotipos de género, mayor probabilidad de ejecutar y recibir violencia, mayores niveles de psicopatología, menor uso del preservativo y conductas de riesgo en las relaciones sexuales", tal como indicaba Alejandro Villena, psicólogo, sexólogo y coordinador técnico de'Hablemos de… Sexualidad', un proyecto del Colegio Oficial de la Psicología de Madrid, presentado este pasado mes de junio, que busca prevenir problemáticas y acabar con los estigmas que rodean a la sexualidad humana.

Según cifras aportadas por este colegio, en menores de edad, la tendencia al alza con respecto a 2009 está presente tanto en ellos como en ellas. En 2023, el 97,3% de chicos y el 78,33% de las chicas menores de 18 años consume pornografía, un crecimiento exponencial si se compara con los datos de 2009 (49,2% en ellos y 7,33% en ellas). La edad a la que se produce el primer contacto con la pornografía se sitúa entre los 9 y los 11 años y obviamente el mayor acceso a los móviles y las redes sociales son claves en este aumento.

"Nuestros menores siguen abandonados en los brazos de la pornografía, en particular aquella que presenta diferente dosis de violencia sexual. Y eso no sale gratis. Puede tener consecuencias graves para su salud", apunta el doctor García. Y es que como decíamos al principio este texto, la educación afectivo-sexual es la gran asignatura pendiente de nuestro país, también en las aulas.

Datos más detallados aportados por el colegio exponen que el 50% de jóvenes no ha hablado nunca de sexualidad con sus familias, el 77% nunca ha tratado el tema de la pornografía con sus padres y solo el 10% de los niños/as se muestra satisfecho/a con la educación recibida.

Sí, los padres y madres sí saben hablar con sus hijos

De este modo, es importante saber, tal como expone el doctor García, que "si los padres y madres no dan a sus hijos esta educación, lo harán otros en su lugar, como les ocurrió a ellos cuando eran como sus hijos. ¿Ha merecido la pena ese silencio y ocultamiento? Con el agravante de que en su época no había el nivel de pornografía que hay ahora".

Y además, apunta el experto que debemos romper ese mito de que los padres/madres no saben hablar de sexualidad con sus hijos, "porque sí saben hacerlo, lo que ocurre que les da vergüenza hablar de placer sexual, conductas sexuales, pornografía o masturbación", sostiene el experto, que aconseja, por ello, "tomar la decisión de romper esa tradición que produce dolor y sufrimiento, y comprometerse a ofrecer una nueva visión de la sexualidad saludable e igualitaria".

Una sexualidad que debe incluir, tal como expone García, las siguientes claves: su propio modelo de relaciones afectivas como alternativa a la pornografía; responder a todas las preguntas (o promoverlas) que desde los 3-4 años todos los niños/as hacen sobre el sexo y los afectos y abordar diversos valores como el respeto, la responsabilidad, la libertad, la empatía o la igualdad.

También, es clave trabajar, finaliza García, "habilidades como la autoestima o la asertividad, que tienen mucho que ver con numerosos riesgos de salud sexual y reproductiva. Y por último, llevar a cabo diversas sesiones educativas sobre otros tantos temas sexológicos con el fin de competir con el modelo de sexualidad que les ofrece la pornografía violenta".

En este artículo, 'Cómo hablar de sexo con los hijos (y protegerlos del porno)', cuatro especialistas en psicología y sexología hablaban con laSexta sobre cómo ayudar a las familias a abordar con sus hijos e hijas, con confianza y responsabilidad, todo lo relacionado con la sexualidad, más allá de la parte física y biológica.