Antes, se decía que el café era malo para el corazón. Si tienes más de 40 años, probablemente hayas oído esta frase durante media vida: que subía la tensión, que provoca arritmias, que… Nada de eso. La ciencia ha demostrado que tomar café a diario (en cantidad moderada) es buenopara el corazón porque reduce las enfermedades cardiovasculares. Pero ¿cuánto beber al día? Y sobre todo ¿cómo tomarlo: café sólo o con leche, en grano, molido, instantáneo...?

Como todo en alimentación, "el café, cuánto menos procesado mejor", afirma a laSexta.com el Dr. Armando Oterino (@ArmandoOterino), cardiólogo del Hospital Universitario de Salamanca y miembro de la Asociación de Riesgo Vascular y Rehabilitación Cardiaca de la Sociedad Española de Cardiología (SEC).

"Mejor tomar el café sin azúcar, sin natas, sin edulcorantes ni nada por el estilo. Pero lo que está claro y demostrado es que tomar el café sea sólo o con leche (mejor leche desnatada) o sea el café de grano, molido o instantáneo es beneficioso para la salud cardiovascular", asegura el experto. Y principalmente lo es -añade el doctor- por su gran efecto antioxidante. El café es un alimento con 'propiedades' antioxidantes.

De este modo, debemos derribar el mito de que el café es malo para la salud y para el corazón porque según han demostrado los últimos estudios, un consumo moderado de café al día es beneficioso para reducir las enfermedades del corazón (que son a día de hoy la primera causa de muerte en España).

Tanto es así que según una de los últimos números de Ciencia Cardiovascular, la revista de divulgación científica de la Fundación Española del Corazón (FEC), sostienen -según evidencia científica- que "el consumo regular de dosis moderadas de café se asocia con una reducción de los eventos cardiovasculares".

La citada publicaciónde la FEC señala así uno de los mayores trabajos realizados sobre el tema, publicado en octubre de 2022 en la revista científica 'European Journal of Preventive Cardiology', en el que participaron unas 450.000 personas sanas (sin enfermedades cardiovasculares al principio del estudio) consumidoras de café frente a 10.000 que no, y que los investigadores evaluaron durante más de 12 años.

Los tres son buenos: café molido, instantáneo y descafeinado

Los resultados de este trabajo observacional mostraron que el café molido, el café instantáneo y el descafeinado arrojaron beneficios observándose "reducciones equivalentes en la incidencia de enfermedades cardiovasculares y muerte por las mismas o por cualquier causa". En el caso concreto de las arritmias se observó una reducción, con el consumo del café molido e instantáneo.

"Justo lo contrario de lo que se decía año atrás, cuando se pensaba que el café aumentaba la tensión arterial y producía arritmias", sostiene el doctor Oterino. Pero desde hace unos años, se está demostrando que "el café protege la salud cardiovascular, incluso las arritmias y la hipertensión. Siempre eso sí, que sea un consumo moderado (2-3 tazas diarias) y dentro de una dieta sana".

Según el trabajo mencionado, la reducción más significativa de las enfermedades del corazón ocurre con la ingesta media de 3 tazas de café al día. Por lo que, tal como describen las conclusiones del estudio, "el café descafeinado, molido e instantáneo, particularmente 2 a 3  tazas al día, se asoció con reducciones significativas en la mortalidad y las enfermedades cardiovasculares incidentes. Además, el café molido y el instantáneo (no el descafeinado) se asociaron con una reducción de la arritmia".

En general, éste y otros estudios observacionales publicados con anterioridad, demuestran que el consumo moderado de café, dentro siempre de una dieta saludable, tiene un cierto efecto protector contra las enfermedades cardiovasculares: "Las dos o tres tazas de café estarían consideradas como una dosis de seguridad, es decir, la dosis que podemos tomar sin aumentar los efectos que puede producir el café a más dosis", aclara el doctor Oterino.

De igual modo, es importante destacar la importancia de llevar una dieta saludable que siga fundamentalmente, el patrón de dieta mediterránea. Es decir, una dieta donde prevalezcan las frutas, las verduras, los pescados, los cereales integrales, carnes blancas, las grasas saludables como los frutos secos y por supuesto, el aceite de oliva. Por tanto, "café sí (2-3 tazas al día) siempre dentro de un contexto saludable de dieta mediterránea y ejercicio físico", concluye el cardiólogo.