La depresión es uno de los trastornos mentales más comunes en todo el mundo. En España, afecta al 6,7% de la población, según datos de la Confederación Salud Mental España, siendo la incidencia el doble en mujeres (9,2%) que en hombres (4%). Los síntomas principales de la depresión son un sentimiento profundo de tristeza y especialmente, la pérdida del placer o interés por cosas que antes nos gustaban.

Cabe destacar el aumento de esta enfermedad en los más jóvenes. Según datos de la Sociedad Española de Medicina de Familia y Comunitaria (semFYC), entre 2014 y 2022, el grupo de 15 a 19 años ha experimentado un incremento del 148% de los trastornos de depresión (pasando de 9.471 casos, en 2014, a 23.467, en 2022) y del 85% en los jóvenes de 20 a 24 años (pasando de 21614, en 2014, a 40.030 en 2022).

Es importante entender cuáles son los síntomas que realmente avisan de la depresión para intentar ponerle solución cuanto antes. Porque sí, la depresión se puede tratar y curar. El tratamiento más eficaz, demostrado científicamente, consiste en una terapia psicológica adecuada para cada paciente y, algunos casos, también se requerirá un tratamiento farmacológico, recetado siempre por un profesional.

Tais Pérez Domínguez y Sergio García Molina, psicólogos y autores del libro 'Cómo gestionar la depresión' (Zenith) explican a laSexta en qué consiste este trastorno mental que puede aparecer por diversas razones. A veces, por ninguna en concreto.

"La depresión se suele confundir la tristeza que es una emoción natural, una emoción primaria y temporal de infelicidad, cuya intensidad puede variar", afirman los autores con motivo del Día Mundial de la Salud Mental (10 de octubre).

"Nos hemos acostumbrado a utilizar a la ligera la palabra depresión. Así solemos decir, 'estoy depre' para resumir un estado de tristeza transitoria, que no tienen nada que ver con el término clínico de depresión. Es natural y habitual sentirse triste ante un acontecimiento de pérdida, pero la depresión va más allá", añaden.

Cómo diferenciar realmente tristeza y depresión

La tristeza es una emoción que experimentamos todas las personas, sin excepción. Todo el mundo siente tristeza en algún momento de su vida, pero, tal como exponen Pérez y García, "no todo el mundo se deprime".

Un elemento distintivo entre ambos es que "la tristeza se considera una experiencia subjetiva, es decir, generalmente es difícil valorar ese estado emocional en alguien de forma objetiva. Mientras que por el contrario, aclaran los psicólogos, "la depresión la podemos observar con síntomas objetivos, claros e independientes de nuestra propia interpretación, ya que estos componen un cuadro clínico muy concreto", cuyos síntomas expondremos a continuación.

Por otro lado, existe igualmente una diferencia en el tiempo de la vivencia emocional: la tristeza dura un periodo relativamente corto de tiempo mientras que la depresión dura, al menos, más de dos semanas.

Por último, también podemos hablar de su función. Es decir, "la tristeza resulta útil para enfrentarnos a situaciones difíciles, mientras que la depresión es invalidante o incapacitante para la resolución de los problemas o de las situaciones", explican.

Síntomas de la depresión

Una vez La depresión es sin duda, una de las "experiencias humanas más dolorosas y complejas" que podemos experimentar y que además, "afecta en todas y cada una de las áreas de nuestra vida", exponen Pérez y García. Tal como escriben, aludiendo a una cita anónima, en una de sus primer páginas de su libro, "la depresión no es simplemente sentirse triste o desanimado, es como estar atrapado en un oscuro laberinto sin encontrar la salida".

Así, este problema o trastorno psicológico afecta a nuestras relaciones personales y familiares, cuando nos vamos a aislando, generando conflictos interpersonales y falta de comprensión en nuestro entorno, y a nuestro rendimiento laboral, por la fatiga, la falta de concentración y la pérdida de interés en lo que nos sumerge.

En particular, en la depresión, describen los psicólogos, "hay un aplanamiento afectivo, una apatía, desmotivación, desgana por lo que antes se disfrutaba. Una perdida de placer en todo. Y por otro lado, una sensación casi omnipresente de inutilidad, desesperanza, impotencia y desvalorización hacia uno mismo".

Es importante destacar uno de los sentimientos más importantes de la depresión que es la anhedonia, esto es, capacidad de no sentir placer ante las cosas que antes sí nos gustaban y nos provocaban bienestar y satisfacción, pero ya no.

Y en general, concluyen los expertos, "la depresión tiene un impacto tremendamente significativo en la calidad de vida, limita nuestra capacidad de disfrutarla, de participar en actividades cotidianas y de mantener relaciones saludables".

En el artículo No escondamos la depresión: así se pueden detectar sus señales y ayudar a una persona que sufre esta enfermedad podemos encontrar con detalle más información acerca de esta enfermedad mental