La viruela del mono, ahora llamada Mpox, es una enfermedad infecciosa de la que existen dos clados diferentes, algo así como dos variantes: clado 1 y clado 2. Según explica la Organización Mundial de la Salud (OMS), los síntomas más comunes serían fundamentalmente, las erupciones en la piel o las lesiones mucosas, signos que pueden ir acompañados de fiebre, dolor de cabeza, dolores musculares o de la inflamación de los ganglios linfáticos.

Este pasado 14 de agosto, la OMS ha declarado de nuevo, la viruela del mono como emergencia sanitaria internacional, tan solo 15 meses después de que este organismo diera por finalizada, en mayo de 2023, la emergencia del año 2022. Entonces, en 2022, la emergencia fue provocada por el virus del clado 2.

España fue uno de los países más afectados de Europa, de hecho es el país europeo que más casos ha notificado desde el 2022 (8104 casos en total, según los últimos datos publicados, 5 de agosto, del Instituto de Salud Carlos III).

Ahora, en 2023, esta nueva emergencia sanitaria se ha declarado por un nuevo brote aparecido en la República Democrática del Congo (RDC). Según explica un artículo de la revista científica 'Nature', "durante el último mes, las infecciones de viruela del mono (mpox) han aumentado en este país, así como en otros cuatro de África central".

Estas infecciones -señala el informe- "probablemente estén relacionadas con un brote que comenzó a finales de 2023 en la provincia de Kivu del Sur, una región de la República Democrática del Congo" y la evidencia indicaría que "la cepa viral que se está propagando en África Central es más letal que la cepa que provocó el brote mundial de mpox de 2022".

Nueva cepa o variante de la viruela del mono: 1b

Durante todo este 2024, los países africanos ya han notificado más casos de mpox o viruela del mono que durante todo 2023 (17.500 casos en 2024 vs 15.000, aproximadamente, en 2023) y algo llamativo es la especial vulnerabilidad de los más pequeños: alrededor de dos tercios de las infecciones en la República Democrática del Congo se dan en personas menores de 15 años, según expone este artículo de Nature.

Algunas de estas infecciones se han atribuido al clado 2 (el que causó el brote de 2022), pero en los últimos meses, se ha notificado también casos de clado 1 (que ha causado durante años pequeños brotes en África). Sin embargo y desde el pasado mes de abril, los investigadores analizaron muestras recogidas en Kivu del Sur a finales de 2023 y principios de 2024, e identificado una variante del clado 1, denominada clado Ib, que "parece propagarse eficazmente entre personas a través de medios como el contacto sexual", expone el informe.

Desde entonces, el virus se ha propagado a zonas densamente pobladas, "presumiblemente a través de poblaciones muy móviles como las trabajadoras sexuales, y a países vecinos", añade el artículo. No obstante, es importante destacar, que Kivu del Sur se enfrenta a una crisis humanitaria que "dificulta el seguimiento y el tratamiento de las personas infectadas".

En España, durante estos 8 meses que llevamos de 2024 también han aparecido más casos de viruela del mono que en todo 2023 (264 vs 202 casos), según datos del Instituto Carlos III; pero por el momento todos los casos notificados hasta ahora, pertenecen al llamado clado 2.

Igualmente, el reciente caso de viruela del mono notificado en un hombre de Suecia del actual brote de mpox (de clado 1) no se conoce aún si pertenece a esta nueva variante 1b. Según ha explicado a SMC, Francois Balloux, catedrático de Biología de Sistemas Computacionales y director del Instituto de Genética del University College London (Reino Unido), "se trata de un diagnosticó probablemente como del clado I mediante la secuenciación del genoma completo"; pero "hasta ahora no se ha dado a conocer si el caso pertenecía al linaje I o Ib".

La persona diagnosticada en Suecia -añade el catedrático- "se infectó durante una estancia en una zona de África donde el mpox es endémico. Por lo tanto, no hay pruebas de transmisión en Europa por el momento".

Las claves de la subvariante 1b de la viruela del mono

Realmente, poco se se sabe todavía de esta nueva subvariante (1b) del clado 1 de la viruela del mono, ya que se ha descrito por primera vez, este pasado mes de abril.

Así, tal como explica en el ya citado artículo de Nature, Anne Rimoin, epidemióloga de la Universidad de California en Los Ángeles, todavía no está claro siquiera, si los síntomas del virus del clado Ib difieren de los del virus del clado 2 que causó el brote de 2022, ni tampoco exactamente cuán peligroso y transmisible es: "Es la pregunta del millón".

Ahora bien, lo que de momento conocemos es que la tasa de mortalidad del clado I de la viruela del mono es más alta que la del clado 2, tal como apunta por su parte, también en este artículo científico, Espoir Bwenge Malembaka, epidemiólogo de enfermedades infecciosas de la Universidad Católica de Bukavu (República Democrática del Congo).

Más allá de la virulencia inherente del virus -explica el doctor- hay factores que podrían ser los responsables de la alta tasa de mortalidad del clado I como que, por ejemplo, "históricamente se ha informado de la presencia del clado I en zonas rurales del país (con pocos recursos sanitarios)".