¿Estás cansado de que tus macarrones se echen a perder después de solo unos pocos días en los tuppers? Pues se acabó, porque tenemos algunos consejos y trucos para ayudarte a hacer que tu pasta dure más y se mantenga fresca por más tiempo.

Siguiendo unos simples pasos, puedes evitar que tus macarrones se apelmacen y prevenir la contaminación.

Si quieres decir adiós a la pasta apelotonada y hola a unas sobras deliciosas, sigue leyendo para saber cómo hacer que los macarrones se conserven mejor.

Cómo conservar la pasta cocida

Existen varios métodos para guardar la pasta cocida e incorporarla a los platos más adelante. Conocerlos te vendrá muy bien para cuando has hecho demasiada cantidad, algo que es fácil que suceda; o si quieres adelantar tus preparaciones.

Refrigerar y congelar la pasta normal cocida, o incluso la pasta con salsa, hace que preparar una cena rápida más adelante en la semana (o en el mes) sea mucho más sencillo.

Puedes guardar cualquier tipo de pasta: espaguetis, penne o conchitas, lasaña… pero los tipos de pasta más pequeños no quedarán tan bien.

Guardar pasta sin salsa en la nevera: aceite o mantequilla

Uno de los factores más importantes para conservar bien la pasta cocida sobrante es almacenarla poco después de hacerla.

La pasta cocida no debe permanecer fuera de la nevera durante más de dos horas. De esta manera, evitarás que se eche a perder antes de tiempo.

Todo lo que necesitas es un recipiente con una tapa hermética o una bolsa con cierre de cremallera, pero el truco infalible para conservar la pasta ya cocida sin estropearse es ponerle un poco de aceite o mantequilla. Hazlo así:

  • 1. Coloca la pasta sobrante en el recipiente o bolsa y rocíala con un poco de aceite de oliva o mezcla con una pequeña cantidad de mantequilla.
  • 2. Remueve bien para asegurarte de que la pasta no se pegue entre sí y esté ligeramente recubierta. El tipo de aceite depende de ti. Utiliza aceite de oliva si sabes que complementará el plato que vas a preparar; si no estás seguro de para qué utilizarás la pasta, entonces un aceite más neutro. El objetivo es que la pasta no se pegue y apelmace. Si estás guardando pasta casera recién cocida, remueve con un poco de harina en su lugar.
  • 3. Si la pasta aún está caliente, deja que se enfríe por completo antes de cerrar el recipiente. Es crucial que el recipiente o bolsa estén muy bien sellados, porque cuando se expone al aire, la humedad en la pasta cocida crea el ambiente perfecto para que crezcan bacterias y moho. Si usas una bolsa de almacenamiento, exprime la mayor cantidad de aire posible antes de sellarla.

Puedes optar por almacenar la salsa por separado de la pasta cocida o mezclarlas antes de colocarlas en la nevera o el congelador.

La ventaja de almacenarlos por separado es que tienes más flexibilidad más adelante y puedes utilizar la pasta para otro plato. Además, a medida que la pasta se asienta en la salsa, puede volverse blanda después de unos días.

Si crees que utilizarás la pasta en un día o dos, la mezcla de salsa y pasta permite que los sabores penetren en los fideos y puede resultar en un plato más delicioso.

Almacena en un recipiente o bolsa bien sellados, con la mayor cantidad de aire posible eliminado.

Cómo conservar la pasta con salsa

La cuestión más importante a la hora de conservar la pasta con salsa es tener en cuenta que, si las mezclamos antes de refrigerar, esto puede hacer que la pasta absorba la salsa y se vuelva más blanda con el tiempo.

Si planeas comer la pasta en un par de días, este no debería ser un problema mayor y podría incluso mejorar el sabor de la pasta, pero a medio plazo no es la mejor opción.

  • Utiliza envases con cierre hermético para evitar que los olores de otros alimentos en la nevera se mezclen con la pasta y la salsa.
  • Haz espacio para la pasta en uno de los estantes superiores. Las condiciones frías la mantendrán fresca durante unos días.

Almacenar la pasta y la salsa juntas

Almacenar la pasta y la salsa juntas puede ser lo más eficiente, sobre todo si no tienes mucho espacio en la nevera.

Almacena en un recipiente o bolsa bien sellados, con la mayor cantidad de aire posible eliminado.

Antes de meterlo al frigorífico, asegúrate de que la pasta cocida no esté super caliente cuando la agregues a la bolsa de plástico. Y una vez que la pongas en la bolsa, no la selles. Espera unos minutos más hasta que la pasta se enfríe.

Antes de sellar o cubrir con una tapa, rocía la pasta con un poco de aceite de oliva, lo que evita que se pegue.

Consejo: nunca aclares la pasta con agua

Muchas personas suelen enjuagar la pasta para enfriarla o porque piensan que de esa manera no se pegará. Para expertos como los de Pastas Gallo, esto alcanza el nivel de "atrocidad".

Al enfriar la pasta con agua después de cocinarla, esta pierde su textura y porosidad y se vuelve lisa y blanda. Solo hay que dejarla enfriar a temperatura ambiente.

Congelar pasta con salsa

La pasta con salsa también se puede congelar y durará hasta tres meses en el congelador. Cuando estés listo para usarla, simplemente descongela la pasta en la nevera durante la noche y luego caliéntala en el microondas o una olla.

La mejor manera de recalentar la pasta

¿Hay alguna forma mejor que otra de recalentar la pasta? Absolutamente. Aquí te dejamos algunas pautas para que tu pasta recalentada tenga el mismo sabor delicioso que la primera vez:

La pasta cocida debe guardarse en un recipiente hermético en el refrigerador y consumirse dentro de los dos días. Si se ha cocinado, pero no se ha mezclado con salsa, añade un poco de aceite de oliva virgen antes de guardarla para evitar que se apelmace.

Cómo recalentar pasta con salsa: lo más recomendable es calentar por un lado la salsa y por otro, la pasta. En el caso de que ya esté mezclada, conseguirás el mejor resultado si la calientas en el microondas. Toma nota de estos trucos para que la pasta recalentada en el microondas quede bien:

  • Añade un poco de salsa adicional antes de calentarla.
  • Puedes cambiar la salsa por un poco de agua para mantener la pasta húmeda y separada mientras se cocina.
  • Luego, cubre el recipiente y calienta la pasta en el microondas a temperatura media de uno a un minuto y medio.
  • Comprueba si la pasta está caliente por completo; si no lo está, revuélvela y continúa calentándola en incrementos de 15 segundos hasta que esté caliente.

Cómo recalentar pasta sin gluten

Desafortunadamente, no es recomendable recalentar pasta sin gluten porque está hecha de maíz y arroz, ambos ingredientes se descomponen más rápidamente y se vuelven pastosos y sin sabor al cocinarlos por segunda vez.

¿Cuánto dura la pasta en el frigorífico?

La pasta cocida debe durar de tres a cinco días si está bien almacenada en el frigorífico. Pasado ese tiempo, perderá su sabor y aumentan las posibilidades de que aparezca moho.