¿Qué es un refugio climático? Así son los sitios gratuitos en los que protegerte de temperaturas extremas

El cambio climático provoca fenómenos meteorológicos cada vez más extremos, desde olas de calor sofocantes hasta inviernos con temperaturas bajo cero. En este contexto, surge la necesidad de proteger a la población más vulnerable, como niños, ancianos, enfermos y mujeres embarazadas, de los riesgos asociados con estas condiciones.

Las altas temperaturas ya no son solo una molestia, sino que representan un riesgo directo para la salud, sobre todo en ciudades densamente pobladas. Entre junio y septiembre de 2022, más de 61.000 personas fallecieron en Europa debido al calor extremo, según un estudio publicado por la revista Nature. Los países más afectados fueron Italia, con más de 18.000 muertes; España, con 11.324; y Alemania, con 8.173. Además, se estima que murieron un 63% más mujeres que hombres, con mayor incidencia en los países del Mediterráneo.

Aunque la conexión entre el calor extremo y la mortalidad es clara, este no es el único impacto de las altas temperaturas en la salud, porque pueden desencadenar otros problemas físicos y mentales.

Y si estos datos te parecen preocupantes, atento: en Europa mueren aproximadamente 8 veces más personas por frío que por calor. Se estima que hay alrededor de 363.809 muertes anuales atribuidas al frío en Europa, según un estudio publicado por The Lancet.

Ante esta situación, en muchas ciudades alrededor del mundo, se han empezado crear espacios dedicados a ofrecer protección ante estos fenómenos. Son los refugios climáticos, lugares donde las personas pueden resguardarse en situaciones de emergencia climática, ya sea por calor extremo, frío intenso o eventos meteorológicos adversos en general.

Aunque estos refugios han ganado popularidad en los últimos años, no todo el mundo los conoce bien. En este artículo vamos a ver qué es y qué características tiene un refugio climático y cómo puede protegernos en tiempos en los que las temperaturas parecen no tener límite.

¿Qué es un refugio climático?

Un refugio climático es un espacio, ya sea interior o exterior, diseñado o adaptado para proporcionar alivio térmico durante episodios de temperaturas extremas. Estos lugares ofrecen un ambiente controlado donde la temperatura se mantiene en un rango confortable, entre los 25°C y 29°C.

Los refugios climáticos suelen ser gratuitos y accesibles para todo el público, proporcionan un entorno seguro y acondicionado, con la temperatura adecuada, agua potable y, en algunos casos, servicios médicos básicos. "Un refugio climático, como mínimo, tendría que ofrecer condiciones adecuadas de temperatura o suficiente sombra, si es un espacio abierto, espacios donde la gente pueda sentarse cómodamente sean como sean sus capacidades y con agua gratuita para quien la necesite", explica Ana Terra Amorim-Maia, investigadora especializada en justicia en la planificación e implementación de la adaptación al cambio climático de la Universitat Autònoma de Barcelona.

Características de un refugio climático

Para que un espacio sea considerado un refugio climático efectivo, debe cumplir con ciertas características básicas. Estas son algunas de las más importantes:

1.Temperatura controlada: se debe poder mantener una temperatura constante y agradable, entre los 25°C y 29°C.

2.Accesibilidad: el refugio debe estar ubicado estratégicamente y ser de fácil acceso para todos los ciudadanos, incluyendo personas con movilidad reducida. La información también es clave para que la ciudadanía pueda beneficiarse de ellos. Por ejemplo, el Ayuntamiento de Barcelona tiene una web con toda la información sobre los refugios climáticos, en la que se pueden consultar los horarios. Además, también hay un mapa para buscar los refugios en Cataluña.

3.Disponibilidad de agua: debe contar con fuentes de agua potable gratuita para garantizar la hidratación de los usuarios.

4.Áreas de descanso: se deben proporcionar asientos cómodos y espacios para relajarse.

5.Horarios amplios: de nada sirve tener una instalación si no está abierta cuando se necesita. Por eso, los refugios climáticos deben permanecer abiertos durante las horas de mayor calor o frío, según la temporada.

6.Confort: además de la temperatura y el agua, habilitar zonas de descanso para leer, charlar o simplemente estar es importante, como explican desde Greepeace. Habilitar zonas de descanso para poder leer, charlar con el vecindario o simplemente estar. Programar actividades gratuitas, por ejemplo, para los niños, ayuda a que las personas puedan pasar el tiempo de forma más amena.

Estas características aseguran que los refugios climáticos no solo sean efectivos en su función principal de proporcionar confort térmico, sino que también sean espacios seguros y acogedores.

¿Dónde se encuentran los refugios climáticos?

La ubicación de los refugios climáticos depende de cada ciudad y su capacidad para crear estos espacios. Hay que tener en cuenta que no sólo se debe asegurar el control de la temperatura, sino también una logística de atención para quienes necesiten permanecer allí durante periodos prolongados.

Las instalaciones comunes donde suelen encontrarse estos refugios son:

•Bibliotecas públicas: al ser edificios con amplios horarios de atención y equipados con aire acondicionado o calefacción, las bibliotecas se convierten en lugares ideales para refugiarse durante una ola de calor o frío.

•Polideportivos y gimnasios: también tienen espacios amplios y adaptables. Ofrecen no solo un lugar seguro, sino también instalaciones sanitarias adecuadas para quienes lo necesiten.

•Centros comunitarios: muchos de estos centros ya están pensados para atender a la población en situaciones de emergencia, por lo que se adaptan fácilmente como refugios climáticos.

•Estaciones de transporte público: Algunas ciudades han adaptado estaciones de tren o metro, donde el flujo de personas es alto, para ofrecer refugio temporal a quienes necesiten protección contra el clima.

La clave es que estos refugios sean de fácil acceso. Desde Greenpeace denuncian que la 'moda' de los refugios climáticos ha hecho que se anuncien tipo de propuestas que se venden como refugios climáticos, pero no todos lo son. Unas de las cuestiones básicas es que las personas deben poder acceder a él de manera gratuita.

"La protección no se paga. Un cine, museo o teatro, aunque se ofrezcan a precio reducido, no son un refugio climático. Si se abren esos espacios deben ser gratuitos. Y un centro comercial tampoco lo es. Por mucho que sea gratis entrar es obvio que acabaremos consumiendo en algún establecimiento para poder pasar el rato de forma más cómoda", aseguran. También alertan de que abrir unos días sueltos o hacerlo solo entre semana, o de 10 a 14h, por ejemplo, le quita cualquier efectividad al espacio.