Este informe refleja que España se ha convertido en el segundo país europeo más preocupado por la salud mental, después de Suecia, donde la preocupación por estos trastornos siempre ha sido elevada, incluso antes de la pandemia.
Existe una tendencia global, que se confirma también en el caso de España: las mujeres están más preocupadas por la salud mental que los hombres.
Por edades, los menores de 35 años son a quienes más preocupa con un 67 % frente a un 59 % de las personas entre 35 y 49 años y un 57 % entre los mayores de 50.
Si bien, la gran mayoría de la población española (77%) considera que la salud mental es tan importante como la salud física, se piensa menos a menudo en la primera que en la segunda.
Esta tendencia también se percibe en el sistema sanitario, donde solo el 23 % de la población afirma que en España se trata por igual la salud mental y la física, siendo así el país europeo más crítico en este sentido, al mismo nivel que Bélgica.
El estrés y la salud mental van de la mano. Así que no sorprende que el estudio ponga sobre la mesa que el estrés sea el tercer problema de salud más grave al que se enfrenta la población mundial.
El estrés, al igual que la salud mental, ha aumentado tras la pandemia, más de 9 puntos a nivel global y hasta 15 puntos en España.
Esta nueva investigación resalta el impacto que el estrés está teniendo sobre la vida cotidiana de las personas. La mitad de la población española afirma haber experimentado periodos de estrés durante el último año en los que no pudieron hacer frente a la situación.
Además, un 40% se ha sentido deprimido, hasta el punto de sentirse triste y desesperanzado y un 33 % dice haberse ausentado del trabajo en el último año debido al estrés.
Vuelven a ser los menores de 35 años los que más preocupación muestran por el estrés. En este caso no existen diferencias significativas entre hombres y mujeres.
El estudio también muestra que la salud mental es el problema de salud más importante al que se enfrenta la población a nivel mundial, con un media del 44 %. Un dato que ha aumentado 7 puntos desde el año pasado , y 18 desde la pandemia.