La combinación de tratamiento de inmunoterapia y quimioterapia podría convertirse en una de las opciones más efectivas para frenar y retrasar el avance del cáncer de vejiga.
Además, como se recoge en un nuevo estudio que ha concluido la fase 3 de los ensayos clínicos, también podría usarse la inmunoterapia para tratar este tipo de patología con metástasis; si la proteína PD-L1 se expresa en altos niveles.
Mediante el análisis de más de 1.200 muestras de pacientes en ensayo clínico aleatorizado de fase 3, se ha comprobado que la quimioterapia presenta una respuesta menos positiva contra el avance del cáncer de vejiga metastásico, en comparación con otros tratamientos.
De esta forma, los autores de la investigación, desarrollada en el Hospital Mount Sinai de Nueva York, demostrarían la efectividad de los tratamientos de inmunoterapia. A esto se le añade que, por primera vez, ha sido posible comprobar que, si bien la terapia combinada es efectiva para tratar este tipo de patología, el medicamento de inmunoterapia conocido como ‘atezolizumab’ podría usarse también tratamiento de primera línea, al comprobarse la presencia de PD-L1.
Los resultados de la investigación han supuesto un nuevo avance en las terapias oncológicas, ya que podrían respaldar distintos cambios en este campo, como convertir el uso de quimioterapia e inmunoterapia combinadas, en el tratamiento estándar para tratar el cáncer de vejiga.