El 45% de las 2.128 personas que han participado en este estudio 'Hogares con psicología', dice que tiene problemas de sueño, un trastorno que es más habitual en aquellos que conviven con menores y el 12,1% siente soledad de forma frecuente.
Si bien, cerca del 70% de los encuestados sienten bienestar y el 40% expresan que sí son felices.
Este estudio supone un análisis del impacto que ha tenido la Covid-19 sobre la salud mental de los españoles, tanto por la situación de incertidumbre como por el riesgo sobre la propia vida y la de los seres queridos, además de confinamiento y el distanciamiento social.
A pesar de esta situación, no hay atención médica suficiente en lo que se refiere a la salud mental en el ámbito público. La sanidad pública en España cuenta con cinco psicólogos por cada 100.000 habitantes, un cifra insuficiente si se compara con los 18 de media de la Unión Europea o los 26 de la OCDE.
El estudio refleja que no invertir en salud mental tiene un riesgo muy importante
Del total de personas encuestadas, el 15% afirmó seguir un tratamiento psicológico. Las largas esperas de dos a tres meses para obtener la primera cita con un psicólogo y la frecuencia mensual de las citas posteriores hace que los tratamientos que se proponen sean farmacológicos.
Respecto a las variables sociodemográficas, el estudio refleja que cuanto mayor es la edad de las personas, su nivel de ingresos y el hecho de ser hombres, mayores son los niveles de bienestar. Por el contrario, la carga económica, ser mujer, convivir con niños y adolescentes se relaciona con un menor bienestar.