Esta distinción reconoce la excelencia científica de 26 investigadores menores de 40 años procedentes de 11 países. Todos ellos se unen a una red internacional compuesta por 342 investigadores elegidos en años anteriores.

Felipe Cortés es un científico español, de 36 años y especializado en el estudio de la reparación de roturas en el ADNy de sus implicaciones patológicas, realiza su labor investigadora en el Centro Andaluz de Biología Molecular y Medicina Regenerativa, centro mixto del CSIC, la Universidad Pablo de Olavide, la Junta de Andalucía, la Universidad de Sevilla y la Fundación Progreso y Salud.

Los jóvenes investigadores seleccionados por EMBO recibirán un apoyo económico por valor de unos 15.000 euros y la oportunidad de optar a ayudas adicionales para consolidar su equipo de investigación, así como formación para mejorar sus capacidades científicas y de gestión.

Sin duda que un científico español sea reconocido y consiga una beca científica, se trata de una gran noticia para la ciencia y la investigación española pero nos sigue preocupando que tenga que ser reconocido por una Institución Europa y no, en nuestro país. 

Un grave problema ya que muchos de nuestros científicos se están viendo obligados a investigar por su cuenta, sin ningún tipo de ayudas económicas, o tienen que irse fuera de España. De hecho, 7 de cada 10 científicos podrían verse obligados a emigrar en los próximos años. Si no se toman medidas pronto, esta falta de retención de talento, supondrá una fuga de cerebros inevitable.

"Esta elección representa una gran satisfacción personal, ya que se trata de un programa muy competitivo, y es gratificante que se valore nuestro trabajo desde una Institución tan prestigiosa como EMBO. Esperamos que las ayudas que incluye supongan un empujón importante para consolidar nuestro trabajo a nivel internacional", ha comentado Felipe Cortés.