La jefa del Servicio de Epidemiología del Cáncer del Centro Nacional de Epidemiología (CNE) del Instituto de Salud Carlos III, Marina Pollán, ha explicado durante su intervención en el V Simposio Internacional de Cáncer de Mama que la vitamina D puede ser clave en la prevención del cáncer de mama.
Estos datos, que muestran un efecto "especialmente significativo" en los tumores triple negativos, fueron obtenidos de un estudio epidemiológico llevado a cabo por investigadores del CIBERESP y del CNE, según informa en un comunicado el Instituto de Salud Carlos III de Madrid.
Aunque la exposición solar constituye la principal fuente de exposición a vitamina D, no hay un consenso sobre los niveles óptimos de este nutriente en el organismo y diversos organismos internacionales han establecido un punto de corte entre los 50 y 75 nmol/L.
En España, a pesar de la climatología, más de la mitad de mujeres sanas que participaron en el estudio mostraron concentraciones de vitamina D inferiores a las recomendadas. Los investigadores observaron que el riesgo de padecer cáncer de mama disminuía conforme aumentaban los niveles de vitamina D en sangre y comprobaron que el efecto preventivo de esta vitamina fue especialmente patente frente al cáncer de mama triple negativo.
Los autores del estudio, liderado por Marina Pollán y Virginia Lope, han señalado que, dada la elevada proporción de mujeres con concentraciones insuficientes de vitamina D en España, "sería necesario el desarrollo de estrategias preventivas encaminadas a mejorar los niveles de dicho nutriente".
El estudio ha contado con la participación de investigadores de doce comunidades autónomas y una muestra de 546 mujeres con cáncer de mama y 558 mujeres sanas. Se trata del primer estudio desarrollado en España que proporciona información de la asociación entre los niveles de vitamina D en sangre y los diferentes tipos histológicos de cáncer de mama.