Según la Asociación Española Contra el Cáncer (AECC), en la actualidad se conocen algunos factores que tienen relación con el cáncer de vejiga:
- El consumo de tabaco, independientemente de si es a través de cigarrillos, puros, pipas, tabaco de mascar, etc. De hecho, los fumadores presentan el doble de riesgo de tener este tumor que las personas no fumadoras, ya que las sustancias cancerígenas del tabaco pasan a la sangre, son filtradas por el riñón y se concentran con la orina en la vejiga.
- La edad avanzada, como en la mayoría de los tumores. Este cáncer es muy poco frecuente en la población que tiene menos de 40 años.
- Los hombres tienen entre dos y tres veces más riesgo de desarrollarlo que las mujeres. Probablemente sea debido a que, en general, son los que más tabaco consumen.
- La exposición laboral, y más concretamente para los trabajadores de determinadas industrias químicas en las que se emplean aminas aromáticas como la bencidina. De modo que, las más peligrosas son las textiles, del cuero, del caucho y de pinturas o colorantes.
- La raza blanca suele presentar mayor riesgo que la afroamericana y la asiática.
- Las infecciones crónicas de vejiga, pues el parásito Schitosoma supone un factor importante para este cáncer, aunque cabe destacar que en España no se da esta clase de infección.
- Determinados agentes quimioterápicos, como la ciclofosamida o la ifosfamida, dos fármacos empleados en el tratamiento del cáncer. Por lo que, para reducir o evitar la irritación vesical que producen, en ocasiones, se emplea una sustancia protectora llamada mesna.
- Los antecedentes personales de cáncer de vejiga, puesto que elevan el riesgo de aparición de un segundo tumor a ese nivel.
No obstante, es importante señalar que no existen evidencias científicas que demuestren que el cloro que se añade al agua para hacerla potable y la sacarina causen este tipo de tumor.