Las bacterias espejo son unos organismos sintéticos en los que las moléculas tienen quiralidad invertida, es decir, están reflejadas. Su desarrollo lo ha explicado una investigación de Milltown Partners, publicada en 'Science'.

Estos organismos podrían ser un peligro para la salud. Los investigadores están trabajando en la creación de este tipo de bacterias y piden que haya un diálogo entre ellos y las políticas de cara a comprender y aliviar los riesgos de las bacterias espejo.

El equipo de investigación está formado por 38 autores de nueve países, formados en diferentes ramas como inmunología o bioseguridad, y han realizado un informe técnico de 300 páginas.

Con el estudio explican que las defensas humanas, animales y de las plantas dependen del reconocimiento de formas nucleares especificas, si existe un reflejo de estas formas el reconocimiento cambia y se podría producir un fallo en las respuestas inmunitarias.

Por otra parte, observaron que estas bacterias pueden esquivar depredadores naturales que dependen de las interacciones mediadas por quiralidad. Las poblaciones ambientales generalizadas de bacterias espejo ponen en riesgo de infección a los humanos, animales y plantas.

Con todo esto, los investigadores reclaman un examen a fondo de sus hallazgos y piden que no se creen bacterias espejos a no ser que se verifique no suponen ningún riesgo. Además, están planificando eventos para 2025, como el del Instituto Pasteur de París, en los que analizar los resultados y debatir las medidas.