Alberto Núñez Feijóo sostiene que aspira a una mayoría absoluta que le permita gobernar en solitario tras el 23J. Así lo ha defendido el líder del PP en un acto en Toledo este domingo, a tres semanas de las elecciones generales, mientras su partido continúa pactando con Vox y sumando concesiones a la ultraderecha.

"Le sentaría muy bien a España esa mayoría suficiente para gobernar en solitario", ha afirmado Feijóo. Una mayoría absoluta, ha esgrimido, para "ser presidente de todos los españoles, sin bloques ni bloqueos". "No volveremos a ninguna minoría que nos imponga a la mayoría", ha clamado.

Un acto en el que el líder 'popular' ha estado arropado por numerosos alcaldes elegidos en mayo y en el que ha estrenado su vídeo de presentación como candidato, en el que vuelve a sus orígenes y aspira a ser visto como un servidor publico al servicio de todos, aludiendo a los ciudadanos que "no están en los extremos". Y, sin embargo, en las últimas semanas a su partido le ha tocado pactar con ellos.

Las concesiones del PP a la ultraderecha

En la Comunitat Valenciana, con un Carlos Mazón con prisa por gobernar, el PP ha asumido la petición de Vox de cambiar el concepto de "violencia machista" por "violencia intrafamiliar".

Pese a que este domingo la alcaldesa de Valencia, María José Catalá, rechazaba "ni una lección de feminismo a las mujeres del PP ni de lucha contra la violencia de género", lo cierto es que la ultraderecha tendrá allí la Vicepresidencia de Cultura y las Consejerías de Agricultura y Justicia.

En Extremadura, el PP ha entregado a Vox, un partido que niega el cambio climático, la Consejería de Gestión Forestal y Mundo Rural, y ya hablan de eliminar trabas climáticas y de ampliar regadíos.

Allí, la presidenta 'popular', María Guardiola, -que en cuestión de días ha pasado de rechazar un gobierno con Vox a tragarse sus palabras- también ha comprado el léxico de la ultraderecha, y el viernes admitía que "la violencia machista como tal no aparece en el acuerdo" de gobierno.

En Baleares, Vox no tiene consejerías, pero ha logrado el compromiso de eliminar la ley trans autonómica y la de Memoria Democrática. Todo ello, ante un Feijóo que ha tenido ir cambiando de discurso, tras justificar inicialmente dónde pactar y dónde no en función del umbral de voto alcanzado por la extrema derecha, y que ha caído en su propia trampa para acabar asimilando las tesis de esta.

Yolanda Díaz: "El vicepresidente de Feijóo se llama Abascal"

Entretanto, los socialistas cierran filas en una precampaña en la que aseguran que los 'populares' tienen la derogación como única propuesta. Así lo ha criticado este domingo la ministra de Hacienda y candidata por Sevilla, María Jesús Montero, que ha reprochado que el PP tenga "derogación como título y lema de su campaña" y que "la palabra del señor Feijóo tiene las patas muy cortas".

Por su parte, Pedro Sánchez -centrado este fin de semana en el arranque de la Presidencia española de la UE- ha arremetido contra los pactos locales y autonómicos de los 'populares' con Vox en una entrevista con 'El Periódico', en la que ha afirmado estar viendo el "tráiler de una película tenebrosa": "¿De dónde sale esta gente?", ha aseverado.

Una acusación a la que el líder de extrema derecha, Santiago Abascal, ha respondido así aseverando que "lo único tenebroso" es "el presidente del Gobierno".

Por su parte, Yolanda Díaz ha reclamado a Feijoo valentía para reconocer quién será su segundo en caso de ser presidente: "El vicepresidente del señor Feijóo se llama Abascal", ha sentenciado la líder de Sumar, quien, tras el giro del líder de la oposición admitiera sobre la reforma laboral, le ha instado a "ir al Tribunal Constitucional y retirar el recurso que han formulado" en contra.

Desde Cataluña, Esquerra Republicana quiere evitar cualquier gobierno en el que entren 'populares' o la extrema derecha, según ha manifestado el president de la Generalitat, Pere Aragonès, en declaraciones a 'La Vanguardia', donde ha señalado que ambas formaciones "representan un grado de hostilidad mucho mayor".

La CUP va más allá y y vuelve a poner sobre la mesa la autodeterminación como un derecho fundamental: "Pedro Sánchez va a tener que escoger si regalar su país a la derecha o a la extrema derecha o apostar por los derechos fundamentales", ha aseverado la diputada Mireia Vehí.

El PNV, por su parte, deja claro que no son "la muleta de la estrategia de otros equipos", pero se compromete a no apoyar a Feijóo porque, dice, ha cruzado la línea roja pactando con la ultraderecha.