Empezaron siendo nueve futbolistas y ahora son casi 40. Forman parte del primer equipo de fútbol LGTBI creado en España. Para Felipe Cruz, su fundador, es todo un orgullo: "Somos un equipo inclusivo con gays, heterosexuales; también chicas".
Para José Manuel estar allí supone un orgullo, pero también un refugio. Desde los 16 años lleva sufriendo discriminación en los vesturarios. "De ser uno de los primeros elegidos para jugar en grupo a quedarme uno de los últimos. Ahí noté el rechazo", explica.
Si algo caracteriza a esta equipación son sus valores y todos coinciden en reclamar más visibilidad en el mundo del fútbol. "Si algún jugador diera ese paso y saliera del armario haría un gran favor a nuestro colectivo", señala Felipe. La homosexualidad en este deporte sigue siendo un tabú. Así lo reconocía por ejemplo Griezmann hace tan sólo unos días.
"Los futbolistas no salen del armario porque tienen miedo a que les insulten. Si yo fuera homosexual lo diría, aunque es más fácil decir esto cuando no lo eres", contaba en una entrevista el jugador del Atlético de Madrid.
Además en numerosas ocasiones se oyen cánticos en los partidos divididos entre los insultos y faltas de respeto que hasta el momento no han sido penadas. Por eso quizás hagan falta más equipos como éste.