Jane Park tiene 23 años, es de Reino Unido y hace seis se convirtió en la ganadora del Euromillón más joven de la historia. Su vida cambió por completo: dejó su trabajo, invirtió gran parte de su dinero en tratamientos cosméticos, viajó por destinos paradiasiacos y adquirió distintas propiedades.
Sin embargo, cuatro años después anunció su intención de demandar a la Administración de Loterías para que aumentara la edad mínima para poder participar y ganar estos premios. "Los últimos tres años no los he disfrutado. Es estresante", aseguraba. "Creí que mi vida sería 10 veces mejor, pero fue 10 veces peor. La vida sería más fácil si no hubiese ganado", añadía.
Y es que, según esta joven, ganar un millón de euros a esa edad le arruinó la vida porque ya no sabía quién se acercaba a ella por interés. Entonces, decidió volver a su "rutina normal" y recuperar su trabajo de administrativa.
Ahora, con 23 años, según publica 'Mirror', ha lanzado una propuesta para encontrar el amor después de que sus relaciones no funcionaran. Ofrece 60.000 libras al año a un "hombre adecuado" con el que pueda "salir a comer y cenar".
Según fuentes consultadas por este diario, "Jane tiene tendencia a sentirse insegura y se preocupa por los objetivos de las personas. Por eso está dispuesta a pagar un precio por encontrar a alguien leal".