Estos días, Madrid se llena de espíritu Navideño, pero también de mucha, mucha gente. A los residentes locales se suman visitantes de toda España; especialmente, de Canarias, Extremadura y Galicia. El primer reto para acercarse a comprar al centro es encontrar un 'párking', y lo siguiente conseguir llegar al destino elegido, algo que no es tan fácil como parece.
La Calle Preciados normalmente se recorre en cinco minutos, pero, según se acercan las fechas navideñas, ya comienzan a ser necesarios más de 20. Pero no termina aquí. El récord de paciencia lo tienen sin duda los que aguantan hasta tres horas de cola para comprar un boleto de Lotería en Doña Manolita.
La alternativa es buscar la suerte en los loteros ambulantes porque estos dáis en Madrid hay que esperar hasta para hacerse una foto. Por eso muchos turistas escapan a destinos más tranquilos, como Bilbao. También cuenta con su encanto Benidorm, con una playa transitada hasta en pleno diciembre.
La ocupación hotelera en la ciudad supera el 85% estos días. La razón: buen tiempo y gran afluencia que permiten unir en la misma imagen trajes de baño y gorros de papá noel.