Andreas Mikkelsen lidera un Rally de Polonia marcado por los 'cabestros'

Un absoluto despropósito lo vivido durante este viernes en el Rally de Polonia. La cita ya dejó ver durante el jueves que seguramente iban a verse imágenes completamente descabelladas con algunos espectadores. El shakedown tuvo sufrió varios retrasos, pero el verdadero miedo estaba situado en la primera etapa ‘real’ de esta edición número 80 de la prueba polaca. Estaba 100% justificado ese temor.

Ni siquiera los numerosos vídeos con los pilotos como protagonistas consiguieron salvar la situación. De las siete especiales programadas para esta primera jornada, dirección de carrera tuvo que tomar la decisión de cancelar dos, el TC3 y el TC7, mientras que en el TC6 se tuvo que sacar la bandera roja y también tuvo que ser detenido durante bastantes minutos, llevando a que algunos competidores también se vieran afectados por este impasse antes del inicio de la acción nuevamente.

No eran ajenos en el Rally de Polonia en lo referente a estos problemas con la colocación de los espectadores. Tras la edición de 2015, los organizadores fueron notificados de que habían sido amonestados con una tarjeta amarilla. De esta forma, además de un numero de medidas extraordinarias, la prueba estaba amenazada con que, de repetirse los problemas en 2016, se quedarían fuera del Campeonato del Mundo de Rallies.

Si bien salvaron esa primera papeleta, sólo se tuvo que esperar un año más para que la definitiva tarjeta roja les fuera sacada, quedándose fuera del Mundial y viéndose relegados al ERC durante los últimos años, hasta que se le dio la oportunidad en este 2024 de poder celebrar el llegar a una cifra tan redonda como la de ochenta rallies de Polonia. Siete años más tarde, la afición asistente a la prueba no parece haber aprendido y tras levantar muchas criticas por parte de equipos y pilotos en 2017, apuntando la mayoría a que no se debería regresar a este evento, la situación parece haberse repetido.

Mientras tanto, los pilotos han intentado pelear en los impresionantes caminos de tierra de alta velocidad de la prueba, con grandes cambios de rasante y una superficie que finalmente no estaba tan blanda y arenosa como apuntaban las previsiones. Andreas Mikkelsen era el sorprendente líder de esta primera jornada después de aprovechar todo lo posible entre cancelaciones y neutralizaciones su retrasada posición de salida.

Mārtiņš Sesks, que debutaba aquí al volante de un Ford Puma Rally1 sin el elemento híbrido también fue capaz de imprimir mucha velocidad durante la mañana, sin embargo, la neutralización del TC6 le llevó a perder temperatura en neumáticos y frenos mientras esperaba a que se solucionara la brecha de seguridad y esto le llevó a perder 5,5 segundos, cayendo de la segunda a la cuarta posición, algo que se convertiría posteriormente en una quinta plaza después de ser superado por su compañero en M-Sport, Adrien Fourmaux.

Para el piloto letón está siendo un gran debut ya que, por normativa, su unidad puede retirar la parte híbrida, perdiendo esos CV extra que empuja el motor eléctrico, sin embargo, se debe compensar el peso de la unidad y todos los componentes retirados con un lastre de 100 kilogramos.

También sería protagonista durante la jornada un Kalle Rovanperä al que le tocó entrar a la prueba a última hora después de que Sébastien Ogier y Vincent Landais tuvieran un accidente el pasado martes mientras realizaban los reconocimientos de la prueba. El piloto francés pasó la noche en el hospital, aunque se descartó cualquier lesión de gravedad, mientras que Kalle tuvo que subirse inmediatamente el miércoles al coche de reconocimientos para hacer 14 horas de toma de notas y preparación para la prueba. El finés reconocía que se había quedado dormido sobre el portátil en la noche del jueves mientras revisaba todos los vídeos de los recces e incluso apenas tuvo cinco kilómetros en el shakedown para configurar el Toyota GR Yaris Rally1 a su gusto antes de comenzar el jueves con la primera superespecial.

Aun así, el bicampeón ha rallado a gran nivel, estando segundo a 1,8 segundos de Mikkelsen tras 8 de los 19 tramos que componen el itinerario, mientras que Elfyn Evans es tercero a dos décimas de Kalle. El equipo Toyota ha tenido menos esperanzas en el resultado de Takamoto Katsuta, muy incómodo y sin confianza en el coche durante el bucle matinal, algo que ha podido solucionar de forma parcial al mediodía, a pesar de que se trataba de un día sin asistencia intermedia y sólo con una zona de cambio de neumáticos. El japonés es octavo a 2,5 segundos de la posición del líder del WRC 2024, un Thierry Neuville al que le ha pasado mucha factura abrir pista este viernes.

Entre medias se han situado los Ford de M-Sport, con Fourmaux cuarto, seguido de Sesks y de Grégoire Munster, estando los cinco primeros en apenas 7,7 segundos tras esta primera jornada competitiva. El que se ha quedado fuera es Ott Tänak, autor de los mejores tiempos este jueves en el shakedown y en el TC1 y, por tanto, primer líder del Rally de Polonia. El estonio golpeó a un ciervo en el primer tramo del día cuando circulaba a 189 km/h, algo que dejó muy dañado el frontal del Hyundai i20 N Rally1 e hizo abandonar al Campeón del Mundo de 2019 para romper su inercia positiva tras ganar en Cerdeña. Por su parte, Sami Pajari es líder destacado del WRC2.

Porsche 956: una leyenda de Le Mans que, técnicamente, podía correr boca abajo