EL MADRILEÑO SIEMPRE HA PUNTUADO EN BAKÚ
Azerbaiyán, juez en el 'caso Sainz'
El Mundial de F1 visita Azerbaiyán, un GP imprevisible que puede resultar crucial para las aspiraciones del piloto de Ferrari.
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El Mundial de Fórmula 1 aterriza en Bakú, un lugar que ha dejado algunas de las mejores carreras de la temporada desde que llegara al calendario en 2017. Accidentes, Safety Cars, sanciones, banderas rojas, resalidas… Un circuito imprevisible que puede dar un vuelco a la clasificación ahora que nos acercamos al ecuador de la temporada. Aquí, nadie ha podido repetir victoria y hemos visto podios inverosímiles como el de Stroll en 2017 o los de Gasly y Vettel el año pasado.
Red Bull ha confirmado el sorpasso a Ferrari en las últimas carreras, tanto el en el Mundial de Pilotos con Verstappen, como en el de constructores. El piloto neerlandés atesora 15 puntos en la tabla, 11 más que Leclerc, gracias a una racha espectacular con tres victorias seguidas (Ímola, Miami y España) y un podio (Mónaco). Misma situación para Pérez, que tras vencer en el Principado, pisa los talones a Leclerc (sólo seis puntos entre ambos).
Sin embargo, la historia para ambos en Bakú es otra. Mientras que el mexicano ha alcanzado el podio en tres ocasiones, victoria en 2021 incluida, Verstappen nunca ha subido al podio aquí. En 2018 protagonizó uno de los momentos más tensos de los últimos años en Red Bull al tocarse con Ricciardo y la temporada pasada reventó un neumático cuando lideraba cómodamente. Aquel accidente dio lugar a una resalida a una vuelta en la que ocurrió de todo: Hamilton sobrecalentó los frenos, tirando una victoria segura; Sainz se fue largo en el mismo lugar y Alonso firmó una vuelta mágica adelantando tres posiciones.
Sainz, a contrarreloj
Precisamente Sainz tiene una gran oportunidad en Azerbaiyán. Por primera vez esta temporada, en Mónaco supero a Leclerc en carrera, haciendo gala de su destreza a la hora de leer la estrategia. El piloto madrileño desoyó a Ferrari y decidió cambiar directamente de neumáticos de lluvia extrema a secos y, cuando la Scuderia quiso replicarlo con Leclerc, ya era demasiado tarde. Asimismo, Sainz se mantuvo muy cerca en tiempos de su compañero durante todo el fin de semana, mostrándose sensiblemente más cómodo con el monoplaza que en carreras anteriores.
Quién sabe si Bakú puede suponer un punto de inflexión. Un circuito que hace de la excepcionalidad su norma habitual y del que Sainz guarda buenos recuerdos. Ha puntuado siempre, con la particularidad de haberlo hecho con cuatro equipos diferentes (Toro Rosso, Renault, McLaren y Ferrari). Las carreras van pasando y si la distancia con Leclerc no disminuye pronto, no sería descabellado ver las primeras órdenes de equipo en Ferrari. El tiempo apremia y qué mejor sitio que este trazado para dar ese ansiado golpe en las mesa.
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