el cántabro está en cabeza en México tras la primera etapa
Dani Sordo comienza líder a pesar del regreso de Loeb
Dani Sordo ha realizado una actuación excepcional durante la jornada inaugural de la prueba mexicana, en la que ha sabido contener los ataques del nueve veces Campeón del Mundo.
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Debía aprovechar su posición de salida. Dani Sordo regresaba al Mundial de Rallies sabedor de que en México era uno de los favoritos gracias a que el cántabro era uno de los más retrasados en el orden de salidas a los tramos, situación similar a la que se encontraban otros hombres como Kris Meeke o el nueve veces Campeón del Mundo, Sébastien Loeb, el cual participaba en la prueba azteca para realizar la primera de las tres apariciones que tiene programadas junto a Citroën Racing para complementar su programa principal con Peugeot en el World RX 2018.
Sería en la especial de El Chocolate donde el español del equipo Hyundai Motorsport terminaría por presentar su candidatura al triunfo. Con un estratosférico scratch más de 11 segundos mejor que el siguiente clasificado, Sordo conseguía encaramarse a lo más alto de la clasificación general, algo que repetiría en el siguiente tramo, consolidando una importante diferencia sobre su antiguo compañero en MINI, Kris Meeke.
En los tramos de la tarde, Sordo volvería a apretar, aprovechando su feeling especial con ese segundo tramo en el que lograba asaltar el liderato por la mañana. Aprovecharía el doble error de Meeke en forma de trompo, quedándose en este caso el piloto de Citroën fuera de las posiciones provisionales de podio, sin embargo, la amenaza surgiría con nombre propio: Sébastien Loeb, el cual conseguía su primer scratch en más de tres años de ausencia y se encaramaba a la segunda posición de la general. Al término de la primera etapa, el alsaciano, copilotado por un Daniel Elena ya recuperado de su problema en el coxis que les obligó a abandonar el Dakar 2018, se quedaba a sólo 7,2 segundos de Sordo en un duelo que recordará a muchos cuando ambos compartían equipo a finales de la pasada década.
Mientras tanto, Thierry Neuville acumulaba mil y un problemas. Además de tener que salir primeros a los tramos y tener que barrer la capa de gravilla superior, el belga, líder del Campeonato del Mundo, sufriría problemas con la presión de combustible que le hacían perder más de 25 segundos en la superespecial urbana en la localidad de León que apenas contaba con 1,11 kilómetros de recorrido. En ese mismo lance, se golpeaba el brazo izquierdo con su puerta, la cual quedaba abierta después de que el piloto de Hyundai tratara de realizar unas comprobaciones, lo que le reportó un fuerte dolor que le acompañaría el resto de la jornada. Finalmente, un problema de dirección asistida terminaría por dilapidar cualquier opción de conseguir un buen resultado, obligándole a que tenga que salir de nuevo a los tramos del sábado en primera posición al haber terminado último el viernes entre los prioritarios.
No sería mucho mejor jornada para Toyota. Tanto Latvala como Lappi sufrirían desde el inicio problemas de motor, el cual llegaba incluso a ponerse en modo enlace como forma de preservar su integridad ante las altas temperaturas que estaba alcanzando. Ninguno de los dos pilotos finlandeses conseguiría terminar el día, siendo Esapekka el primero en confirmar su abandono después de una salida de pista y siendo Jari-Matti el encargado de cerrar un mal día para el fabricante asiático al tener que retirarse también por un problema con el alternador. Sólo Ott Tänak seguía en carrera, tercero y a sólo 11 segundos de Dani Sordo después de lograr el último scratch del día.
Tampoco M-Sport tenía el mejor de sus inicios, con un fuerte susto después de ver cómo Elfyn Evans perdía el control de su Ford Fiesta WRC en una sección de sexta velocidad después de una fuerte compresión en la que el coche del galés salía rebotado. Tras recorrer una centena de metros sin control, el Fiesta volcaba y dejaba al copiloto del ganador del Rally de Gales 2017, Daniel Barritt, afectado por el golpe. La formación británica decidía retirar ala pareja para que estos pudieran acudir a la asistencia médica para realizar los pertinentes chequeos. Mientras tanto, Sébastien Ogier se mantenía quinto, a rango de sólo medio minuto de las posiciones de cabeza, sin embargo, los de Malcolm Wilson deberían lamentar el abandono de Teemu Suninen, su tercer piloto oficial, también por salida.
Que el Rally de México 2018 estaba siendo muy duro con las mecánicas y con los pilotos quedaba confirmado echando un simple vistazo a la clasificación del WRC2. El prometedor Kalle Rovanperä abandonaba junto a Nil Solans en la primera especial de la etapa. A ellos les seguía Jari Huttunen, joven promesa de Hyundai que dañaba el radiador de su i20 R5 exactamente en el mismo punto en el que también lo habían hecho el finlandés, hijo de Harri Rovanperä, y el campeón del WRC3 y del JWRC en 2017. El de Matadepera, que se encuentra aquí realizando su primera prueba del WRC2 con el Ford Fiesta R5 de M-Sport, intentará reengancharse durante la jornada de mañana gracias al Rally2. Por su parte, Pontus Tidemand lidera la categoría con una ventaja que ya supera los 3 minutos y medio sobre el británico Gus Greensmith.
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