¿Es la competición el lugar perfecto para limpiar el nombre de Volkswagen?

Desde que estallara el escándalo de las emisiones de Volkswagen y su método ‘artificial’ para reducirlas, una de las principales preguntas por parte de los aficionados era saber si los programas de competición (muchos, exitosos y muy costosos en el caso del Grupo VAG) corrían peligro. La respuesta por el momento es no, a pesar de las penalizaciones económicas y los recortes a los que se verán obligados a afrontar. Si en el caso de Nissan, una apuesta arriesgada, un diseño extremo y una estrategia comercial agresiva, han supuesto un fracaso que se ha traducido finalmente en la retirada del proyecto GT-R LM NISMO LMP1, precisamente en época vacacional, tratando de limitar así la publicidad negativa, en el caso de Volkswagen la acción debe ser todo lo contrario. Así lo está demostrando la marca germana, que lejos de apartar o cancelar sus participaciones en competición han mantenido la apuesta, un año más. Esto se traduce en Skoda compitiendo en WRC2 (programa parcial), Audi y Porsche a tiempo completo en el Mundial de Resistencia, con programa entre los GT’s y con dos unidades cada uno en las 24 Horas de Le Mans y Volkswagen manteniendo a la postre los tres Polo R WRC oficiales en el Campeonato del Mundo de Rallyes. Los de Wolfsburgo son conscientes de que es necesario hacer recortes, pero sin dar un paso atrás total, algo que les reportaría incluso mayor repercusión negativa ligada a la competición, área en la que no están acostumbrados a fracasar.

La directiva proveniente desde Alemania ha sido la de contener los gastos al máximo, sin embargo, en ninguno de los casos se ha pedido suspender por completo la participación en alguno de los campeonatos en los que han tomado parte durante los últimos años y en los que las victorias se han sucedido. Precisamente el valor positivo que les puede aportar la competición en estos momentos al poderoso grupo automovilístico es más valioso que los gastos subyacentes relativos a la misma. En unos meses pocos se acordarán del escándalo que ha salpicado a la firma germana esta segunda mitad de 2015, menos aun cuando vean a Porsche reeditar con su 919 hybrid LMP1 su triunfo en Le Sarthe, a los Polo R WRC triunfar en Monte-Carlo o a Audi volver a protagonizar de nuevo todos los rumores que lo relacionen con la Fórmula 1. En competición sin duda pueden cambiar el eslogan de ‘ Das Auto’ por el de ‘ Das Sieger’.