¿Queda algún fichaje sorpresa para el Mundial de Fórmula 1 de 2025?

Con Liam Lawson subiendo al Racing Bulls para disputar los últimos seis Grandes Premios de la temporada y evidentemente siendo el principal opositor a ser piloto titular la próxima campaña como compañero de Yuki Tsunoda, la parrilla del Campeonato del Mundo de Fórmula 1 ha quedado prácticamente vista para sentencia a la espera de conocer quién será el otro piloto del equipo Sauber, escudería que pasará a portar la responsabilidad de los cuatro aros de Audi ya desde la campaña del año que viene.

Y es que, a pesar de que Franco Colapinto haya realizado un gran estrepito con sus grandes actuaciones al volante del Williams dejado vacante por Logan Sargeant desde el Gran Premio de Italia, parece que las oportunidades de que el argentino se encuentre en uno de los monoplazas de la parrilla de veinte de 2025 son bastante reducidas, igual que la de otros pilotos que parece que están dando sus últimos pasos en el Gran Circo.

Daniel Ricciardo no ha sonado en ningún momento para las pocas escuderías de la segunda mitad de parrilla, por lo que todo parece apuntar que el australiano, que al parecer llevaba siendo cuestionado por Helmut Marko desde el Gran Premio de España, encuentre un asiento en el que seguir con su carrera deportiva. Con la llegada de los pilotos provenientes de la Fórmula 2, Oliver Bearman y Jack Doohan, ya confirmada, otros dos pilotos veteranos tiene prácticamente que asumir que se han quedado sin hueco, siendo Kevin Magnussen el segundo nombre que en principio debería encontrar un proyecto en resistencia como siguiente paso.

De no haber sorpresas, parece que la parrilla finalmente se cerrará con la continuidad de Valtteri Bottas con el equipo de Hinwil y como compañero de Nico Hülkenberg, en un movimiento que parece que puede responder más al deseo de Mattia Binotto de no tener dos pilotos completamente nuevos para afrontar la próxima temporada y de además aprovechar al máximo el que el finlandés haya trabajado en fábricas como las de Brackley o Grove, una escudería que ha dominado la era híbrida en su primer parte y la segunda, un equipo histórico que también supo aprovechar los primeros años de reglamentación con las unidades de potencia de la estrella para ser competitiva.

Esto supone no sólo que Colapinto seguramente tendrá que afrontar un segundo año en Fórmula 2 buscando pelear por el título a la espera de un asiento libre, sino que pilotos como Mick Schumacher o los dos principales candidatos a ganar la F2, Gabriel Bortoleto e Isack Hadjar tengan muy pocas opciones de no tener que hacer un año de piloto reserva. Incluso el piloto que actualmente ocupa la tercera plaza, Zane Maloney, ya ha anunciado que se pasará al Mundial de Fórmula E con el equipo de reciente creación creado por el triunvirato de ABT, Yamaha y Lola Cars.

Por lo tanto, a la Silly Season apenas le queda conocer un movimiento más para volver a darse por cerrada incluso antes de la entrada del invierno en el hemisferio norte, una situación que hasta hace unos años parecía impensable. Los movimientos de Lewis Hamilton a Ferrari y el de Carlos Sainz a Williams, así como el cambio de aires de Esteban Ocon, destino a HAAS, completan el listado de fichajes más destacados hasta el momento. Quien sabe si puede quedar un último “Golpe de Teatro”… Una Silly Season en la que se ha hablado casi más de contrataciones de técnicos estrella como Adrian Newey que de grandes efectos en los cockpits.

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