Kenta Yamashita bate a Jann Mardenborough y se lleva el título de la F3 japonesa

El pasado fin de semana, como telonero de , el campeonato japonés de Fórmula 3 llegó a su fin tras una lucha que empezó en abril y que se mantuvo abierta hasta la última carrera. Tres pilotos llegaron con opciones de titulo a la última cita y dos a la última carrera, con solo un punto de diferencia entre ellos. Al final, Kenta Yamashita fue el campeón, imponiéndose a Jann Mardenborough, antiguo ganador de la GT Academy. El piloto japonés ganó las tres carreras del fin de semana y demostró haber mejorado enormemente desde la temporada pasada, cuando llegó con opciones de ser campeón peleando con Nick Cassidy, uno de los principales protagonistas del certamen europeo de Fórmula 3 en 2016. A diferencia del año pasado, Yamashita contaba esta temporada con peor motorización, con Toyota viéndose claramente superada por los propulsores Volkswagen que usaba su rival. B-MAX Racing Team, el equipo de Jann Mardenborough, estrenó los motores alemanes en 2016 y rápidamente quedó claro que estaban muy por encima de los Toyota de TOM'S o cualquier otro motor del campeonato. Gracias a ese elemento, Mardenborough consiguió poco a poco ir tomando ventaja en el campeonato, a medida que iba habituándose al coche y a los circuitos. Parecía que el británico, antiguo ganador del programa GT Academy que convierte a "gamers" en pilotos, lo tenía todo para ser campeón.

Pero la experiencia de Yamashita en un circuito tan complejo como Sugo y la tranquilidad que no tuvo en 2015 le dieron la posibilidad de imponerse con claridad, obteniendo el ansiado título de campeón japonés de Fórmula 3. Aunque se desconocen los planes de Yamashita para 2017, las posibilidades de competir en la Super Fórmula o en la Fórmula 3 europea son ambas atractivas y todo dependerá de lo que Toyota quiera hacer con uno de los talentos más interesantes de su programa de desarrollo de jóvenes promesas. Pero si Yamashita y Mardenborough monopolizaron los titulares, el tercer clasificado convenció a lo largo de la temporada. Tras haber sido campeón de la Fórmula 4 japonesa en 2015, Sho Tsuboi debutaba en la Fórmula 3 nacional con pocos objetivos más que aprender de su compañero de equipo pero rápidamente demostró ser el hombre más constante del campeonato, cometiendo muy pocos errores. Tsuboi se subió al podio en quince de las diecisiete carreras del campeonato y será el principal candidato al título la próxima temporada. En cuanto a la llamada Clase Nacional, reservada para coches de Fórmula 3 de generaciones anteriores, Yoshiaki Katayama se llevó un título que era solo cuestión de tiempo, habiendo dominado su categoría durante todo el año. El apoyo de Autobacs en la última cita hace presagiar un futuro interesante para un piloto que el año que viene tiene como opciones estar en la categoría principal de la Fórmula 3 o saltar al Super GT en su categoría pequeña, el GT300. Los jóvenes talentos nipones suben con energía.