Centímetros Cúbicos
Nissan GT-R LM NISMO: ¿Locura, valentía o márketing?
Nissan GT-R LM NISMO: ¿Locura, valentía o márketing?
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La temporada 2015 ha tenido de todo para el programa del campeonato del mundo de resistencia de Nissan. Aunque para hablar en propiedad, habría que referirse al programa de las 24 horas de Le Mans de la marca japonesa puesto que sus coches no han tomado parte en ninguna otra carrera más allá de la legendaria prueba francesa. Desde esos primeros meses de misterio con una capacidad de generar interés que se salía del medidor hasta la culminación de todo con su reciente , en Nissan han vivido lo mejor y lo peor del mundo de las carreras. Todo empezó cuando en mayo de 2014, Nissan anunció que iban a volver a las 24 horas de Le Mans e iban a intentar ganar de forma completamente distinta a sus rivales. Sin especificar de qué se trataba, se empezó a generar interés con esa máquina de marketing que llegó a unas cotas espectaculares con los cada vez más firmes rumores que hablaban de un proyecto con un coche de LMP1 con tracción eléctrica y una presencia importante de componentes eléctricos. No iba a ser tan solo un coche híbrido cualquiera... ni tampoco un LMP1 convencional. A medida que se fueron descubriendo los parámetros que iban a formar uno de los coches más radicales en aparecer en Le Mans, dos voces empezaron a discernirse. La primera daba las gracias a la firma japonesa por su valor, por atreverse a tomar un camino distinto al de todos los fabricantes establecidos. Si les salía bien la jugada, podían no solo hacer historia sino que le sacarían un provecho espectacular a la hora de vender coches... ahí estaban las preocupaciones de la segunda voz. Aseguraba que el Nissan GT-R LM NISMO no era más que un carísimo movimiento publicitario. Ganar con un coche de tracción delantera debería ser imposible. Porque esa es la palabra clave en el proyecto; "imposible". Ganar con un coche con motor y tracción delanteros contra los ya tradicionales motores centrales y tracciones traseras no es algo que pueda esperar verse. Los coches con tracción delantera tienden a sufrir un subviraje bastante acusado, lo mismo que los coches con motor delantero. Si se juntan los dos elementos, el resultado puede ser catastrófico. A favor de los chicos de Nissan hay que decir que su idea era conseguir unas altísimas velocidades punta que compensaran un rendimiento algo más flojo en otras zonas. Si había un lugar donde eso era posible, debía ser en Le Mans. Y una vez más en su defensa hay que decir que incluso con los problemas técnicos que sufrieron en los motores eléctricos, el Nissan GT-R LM NISMO estuvo siempre entre los más rápidos en las rectas, demostrando que el concepto que habían ideado funciona... aunque sea a medias. Aunque lo más increible de toda la historia fue que el principal problema del coche viniera por las suspensiones. Incluso con reglajes más blandos, estas daban una rigidez tan elevada al coche que atacar los "pianos" era imposible sin perder el control. El resultado en ese caso es claro; trazadas fuera de la zona limpia, lo que implica neumáticos sucios, lo que implica menor agarre y peores tiempos por vuelta. Todos estos problemas se vieron en Le Mans pero mucho antes de ello, Nissan debía haber debutado en Spa-Francorchamps como tarde para prepararse. No salieron en la primera carrera, no compitieron en Bélgica y tras la carrera en Le Mans, dejaron de lado el campeonato de 2015 por no tener la preparación suficiente. Preferían centrarse en 2016 y evitar un ridículo que para la marca habría sido aún peor que no competir. Y eso que dejar el programa parado por malos resultados ya es un suicidio a nivel de marketing. Toda esta situación terminó con la marcha de Darren Cox, uno de los cerebros detrás de la GT Academy y gran promotor del proyecto LMP1 de Nissan. Algunos rumores apuntaban a que desde Nissan Japón se había dado un ultimatum a la dirección del equipo. Si los resultados en pista no llegaban, este podía quedar cancelado por completo, lo que supondría un golpe durísimo a las aspiraciones de la marca en el mundo de las carreras ,aunque posiblemente menor que el de continuar dilapidando dinero en un proyecto que hipotéticamente no llevaría a ninguna parte. Desafortunadamente, el final ha sido exactamente este, con el anuncio en diciembre por parte de la marca que iba a dejar de lado el campeonato del mundo de resistencia. A pesar del evidente fracaso deportivo, por ahora aún cuesta discernir si se buscó el golpe mediático o si por el contrario, en Nissan creyeron que ese proyecto podía llegar a ganar. Lo que está claro es que hay un motivo por el que las cosas son como son y por mucho que admiremos a los valientes , está claro que el Nissan GT-R LM NISMO fue una locura. Una valiente locura.
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