BMW suma un nuevo triunfo en las 24 Horas de Spa

Un verano más Spa-Francorchamps fue el escenario de la mayor carrera de resistencia para la categoría GT3, las 24 Horas de Spa. Puntuable tanto para las Blancpain GT Series, como para su Endurance Cup y el Intercontinental GT Challenge, ello hizo que a los habituales del primer certamen se sumaran algunos invitados de excepción. Y entre ellos se encontró finalmente al ganador, pues Walkenhorst Motorsport es una estructura que habitualmente compite en VLN (campeonato de Nürburgring Nordschleife) y que en las 24 Horas de Spa dio a BMW su 24º triunfo.

Con seis españoles en la lista de inscritos, las cosas no pudieron empezar mejor, dado que el Audi R8 de Alex Riberas, Christopher Mies y Dries Vanthoor se hizo inicialmente con la pole. Pero pronto se torció el fin de semana al ser excluidos y sancionados con tres minutos en carrera por una irregularidad en la ventilación de su coche. Pese a ello, Audi colocaba hasta tres de sus coches entre los seis primeros, heredando eso sí la pole uno de los Aston Martin de R-Motorsport.

Sin embargo la carrera sería muy diferente de la Superpole que definió la parrilla de salida. Si en esta última habían brillado coches tipo GT clásico como el Audi R8 o el Ferrari 488 (el de Miguel Molina saldría 3º), sesiones anteriores ya habían dejado entrever el potencial de coches más grandes como el BMW M6 o el nuevo Bentley Continental, que en carrera y en el cuerpo a cuerpo se desenvolvieron a las mil maravillas y pronto pasaron a ocupar los primeros puestos de carrera.

Parecía el escenario ideal para que Bentley cosechara el primer gran éxito de la nueva generación del Continental GT3, pero problemas de fiabilidad y toques con vehículos doblados se cebaron con el equipo oficial, debiendo abandonar el #8 de Andy Soucek tras un segundo accidente ya por la mañana. Posiblemente ello dejó el camino libre a los BMW de Walkenhorst y ROWE, que tras meterse entre la media docena de elegidos que se disputaron la victoria en la mañana del domingo lograron destacarse y alcanzar el doblete para la marca alemana, con triunfo sorprendente para Eng, Blomqvist y Krognes. Mientras que los dos primeros son pilotos de DTM, el tercero de ellos es aún considerado amateur.

Dos Audi R8 GT3 y dos Mercedes-AMG GT3 se clasificaron inmediatamente por detrás de los M6, con Dani Juncadella alcanzando la sexta posición final junto a Raffaele Marciello y Tristan Vautier. Fue el mejor piloto español en meta, seguido del séptimo puesto de Lucas Ordóñez con el Nissan GT-R que compartía con Alex Buncombe y Matt Parry. También acabó entre los diez primeros Miguel Molina al acabar 10º, mientras que Albert Costa, que venía de ganar los 1.000 Km de Paul Ricard, se clasificó 13º. Y Alex Riberas consta en la clasificación final pero en 40ª posición tras sufrir problemas de sobrecalentamiento su Audi cuando ya rondaba el 'top ten' pese a su sanción. En todo caso ello no le impide mantenerse al frente de las Blancpain GT Series junto a Christopher Mies.