Rosemary Smith, la más veterana en probar un Fórmula 1

Una vida ligada a la competición en particular y a los coches en general. Seguramente si alguien le hubiera dicho a esta dublinesa que terminaría siendo piloto de rallyes, les hubiera tratado por loco, sin embargo, uno de los clientes de su pequeña tienda de ropa consiguió convencerla para que le hiciera las labores de copiloto y desde entonces, nunca más pudo separarse de las carreras, compitiendo como piloto, e incluso anotándose algunos triunfos en un mundo dominado en aquella época por hombres. Rosemary Smith, ahora de 79 años y al frente de su propia escuela de conducción, fue invitada por el Renault Sport F1 Team en una de las iniciativas que están realizando durante este 2017 con motivo de su 40 aniversario en la Fórmula 1. La propuesta era que la de irlandesa, con los consejos de Jolyon Palmer y convencida por su antigua copiloto, Pauline Gullick, Rosemary decidía aceptar el reto propuesto por la escudería galo de ponerse al volante de uno de los nuevos monoplazas en el Circuito de Le Castellet, el cual volverá a acoger el Gran Premio de Francia a partir de la próxima temporada. Smith se sumaba así a un programa que durante las últimas semanas también ha llevado a Robert Kubica a volver a pilotar un Fórmula 1, concretamente el Lotus E20 en el Circuito Ricardo Tormo, Paul Ricard y en la gran fiesta del motor vivida en Goodwood. Una iniciativa que también permitirá a uno de los clientes que soliciten un Test Drive de alguno de los vehículos de producción en alguno de los concesionarios de la marca en el Reino Unido. Tras atender a las explicaciones sobre el uso de los mandos del volante y el resto de detalles sobre los Fórmula 1 modernos, Rosemary se sentó en el monoplaza, realizando algunos kilómetros en la pista francesa, suficientes para convertirse en la mujer más veterana que ha rodado en un monoplaza de la categoría reina.

Detrás de las escenas: