Sébastien Ogier apabulla a sus rivales en la primera etapa del Tour de Corse

Programados los cuatro primeros tramos para la jornada del viernes, se esperaba poder volver a revivir el duelo entre Sébastien Ogier y Loeb que pudimos vivir en el pasado y que nunca habíamos podido ver hasta ahora en la isla corsa. Apenas duró un tramo y 300 metros antes de que Sébastien Loeb quedara fuera de carrera. Sería en el inicio de la segunda especial en la que el alsaciano, copilotado una vez más por Daniel Elena, cuando se iba fuera en una curva de izquierdas con la mala fortuna de que su Citroën C3 WRC se quedaba atascado dentro de una cuneta.

La pareja nueve veces Campeona del Mundo de Rallies se quedaba entonces fuera de carrera, allanando el camino para un Ogier que había comenzado volcado absolutamente al ataque, con un scratch en el primer tramo de la mañana, los casi 50 kilómetros de “La Porta – Valle di Rostino”, en el que endosaba una gran cantidad de tiempo a todos los habituales del campeonato. Sólo Loeb conseguía terminar con una desventaja inferior a los 10 segundos.

Ya sin el embajador del Grupo PSA en carrera, Ogier e Ingrassia se anotaban dos scratchs consecutivos en el segundo tramo y el primero del segundo bucle, terminando la jornada con una ventaja que superaba el medio minuto respecto a un Thierry Neuville que no se terminaba de encontrar cómodo con el Hyundai i20 WRC Coupé. Ya en la asistencia del mediodía el ganador del pasado Rally de Suecia realizaba algunos retoques en su montura, algo con lo que ganaba algo de confianza y podría plantar cara al hombre de M-Sport, superándole en el último tramo del día.

No sería una gran jornada para ninguno de los pilotos Hyundai a pesar de la segunda plaza de Neuville, con Mikkelsen saliendo al rally con un trompo en la primera curva y una pequeña salida de pista en la segunda especial y con un Dani Sordo que cedía muchos segundos nada más comenzar la prueba. Muy retrasado en el orden de salida, el cántabro se ha encontrado con mucha suciedad en la carretera en las primeras pasadas, algo que le ha restado confianza a la hora de aspirar a posiciones mejores. Séptimo, era superado en la última especial del día por Lappi, autor del único scratch que no ha recaído en la jornada de hoy en la figura de Ogier.

Completando el podio Kris Meeke, el segundo de los Citroën aquí presentes y que terminaba el día con cinco segundos de desventaja respecto a Neuville. A sus espaldas, los dos primeros Toyota Yaris WRC clasificados, los de Ott Tänak y el propio Esapekka Lappi, el cual aprovechaba ese último tramo para superar también a Elfyn Evans en la general.

En WRC2, el equipo con representación española formado por Nil Solans y Miki Ibáñez terminaba nada más empezar la etapa, con el Ford Fiesta R5 aquejando problemas con el embrague. Jan Kopecky es líder con el Skoda Fabia R5 oficial, mientras que Yoann Bonato es el mejor representante del Citroën C3 R5 que se encuentra realizando aquí su primera prueba internacional y que cuenta con su otro piloto, Stéphane Lefebvre en cuarta posición tras el otro Skoda.