NINGÚN INFRACTOR SE LIBRA
3 multas de tráfico que puedes recibir viajando como pasajero
Las multas de tráfico son uno de los recursos de la administración para controlar y reeducar a los usuarios de la carretera, y aunque a nadie le gusta recibirlas, lo cierto es que es una de las medidas más efectivas.
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La inmensa mayoría de los conductores de nuestro país no tienen porqué preocuparse por las multas o las sanciones que las administraciones imponen a los conductores más despistados o imprudentes. Al fin y al cabo, la razón de ser de estas sanciones se encuentra en la necesidad de corregir y reeducar a los usuarios que no cumplen con unas normas necesarias para el buen funcionamiento de las carreteras y, sobre todo, para reducir al mínimo el posible impacto de las imprudencias.
A nadie le gusta recibir una multa de tráfico, y casi nadie está exento de ello: por pura estadística, casi cualquier conductor ha recibido una multa de tráfico aunque en la inmensa mayoría de los casos se trata de multas de carácter leve tales como exceder mínimamente el límite de velocidad o estacionar de manera incorrecta nuestro vehículo. Sin embargo, lo que no mucha gente conoce es la existencia de multas de tráfico para los pasajeros, ocupantes que deben hacer frente a la sanción sin que el conductor deba ocuparse de ellas de manera solidaria. ¿A qué nos estamos refiriendo?
Las multas de tráfico que no afectan al conductor
Básicamente a multas de tráfico que se imponen a la persona y no al vehículo, sanciones que al estar asociadas a un usuario no suponen un problema para la persona a los mandos del vehículo siempre y cuando, lógicamente, éste no lo haga mal a la vez. Aquí tienes tres ejemplos:
- Uso del cinturón de seguridad: esta es una de las multas más habituales y, pese a la gran concienciación que existe aún es posible encontrar un gran número de usuarios que se resisten a utilizar de manera habitual y sistemática el cinturón de seguridad. En caso de que se detecte a un individuo en un vehículo sin hacer uso del cinturón se le podrá imponer una sanción que será a título personal, de forma que si es el pasajero el que no hace uso del sistema de retención, será el pasajero al que multen.
- Postura incorrecta: hace años era más habitual, y aunque cada vez es menos corriente aún se sigue dando. Hablamos de aquellos ocupantes que, por ejemplo, sacan los pies o los brazos por las ventanillas o se tumban en los asientos traseros. Cuando esto ocurre, y aunque sigan haciendo uso del cinturón, se les puede imponer una sanción a título personal por no viajar con una postura correcta.
- Arrojar objetos: las ventanillas y el techo solar son "tentaciones" a la hora de deshacerse de objetos que no queremos mantener en nuestro vehículo tales como colillas, restos de comida, tickets o envoltorios. Como seguro que ya sabes, arrojar cualquier tipo de objeto por la ventanilla es una infracción de tipo grave que, una vez más, no tiene porqué ser responsabilidad del conductor.
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