El cansancio y la fatiga se van acumulando en nuestro cuerpo a medida que recorremos kilómetros, muchas veces sin ser conscientes de ello. Nuestra capacidad de atención y reacción se reduce, volviéndonos más torpes al volante y por lo tanto, aumentando las posibilidades de sufrir un accidente.
Hay varios factores que pueden evitar la aparición de la fatiga, como por ejemplo haber dormido lo suficiente, llevar una buena y agradable temperatura en el habitáculo del vehículo, parar a descansar ocasionalmente o beber para mantenerse bien hidratado. También se debe tratar de evitar viajar después de una jornada de trabajo.
Te dejamos seis consejos para evitar la fatiga al volante. VER VÍDEO.