Así fue la tortura que usó SEAT para poner a prueba el Ateca

Antes de que llegue un nuevo modelo al mercado, los fabricantes realizan cientos de miles de kilómetros para comprobar las resistencia y calidad de cada componente. Pero no hablamos de kilómetros realizados cómodamente en autovías, sino de distancias cubiertas en algunos de los lugares de la tierra más inhóspitos donde las temperaturas extremas y las condiciones climatológicas y geológicas llevan al límite al coche. Hoy vamos a descubrir cuál fue la tortura a la que sometió SEAT a su último lanzamiento, el . Según explica SEAT, las 3 semanas consecutivas de pruebas se llevaron a cabo en una zona desértica del sur de España - Almería casi con toda seguridad -, donde acumularon más de 25.000 kilómetros entre 40 coches e infinidad de pruebas fuera de asfalto donde poner a prueba las aptitudes del nuevo SEAT Ateca.

Las pruebas de este test "extremo" se realizaron haciendo uso de todas las motorizaciones, incluyendo las tecnologías estrenadas como el asistente para el remolque, el control de descenso o el sistema de tracción total con perfiles de conducción específicos mediante el control SEAT Drive Profile. En Centímetros Cúbicos: |