CON UN COEFICIENTE AERODINÁMICO DE 0.21
Así es el nuevo A6 e-Tron: el eléctrico que soñó Audi
Audi ha logrado con el e-tron algo impensable, llevar a la realidad un concept car sin sacrificar ni un ápice de su visión futurista. Sascha Heyde y Wolf Seebers nos cuentan cuáles han sido los mayores desafíos que han tenido que afrontar para crear esta nueva versión.
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Normalmente, la idea de un concept car es algo distante del producto final y, a veces, incluso inalcanzable. Las líneas elegantes y futuristas que solemos ver en los salones del automóvil rara vez llegan a nuestras carreteras. Sin embargo, la marca de los cuatro aros ha conseguido hacer realidad el sueño de Sascha Heyde y Wolf Seebers sin perder la esencia de la versión original.
Hay que remontarse a 2021, año en el que Audi lanzó el concept car de esta versión, un precursor de lo que sería una familia de vehículos eléctricos con un aspecto futurista. Basta con echarle un vistazo para ver sus intenciones, adelantarse a los diseños del futuro de la movilidad eléctrica.
Según el propio Sascha Heyde, los concept cars permiten a los diseñadores dar rienda suelta a su imaginación, creando vehículos no solo totalmente funcionales, sino también verdaderas obras de arte sobre ruedas. "Los concept cars nos permiten derribar barreras y crear nuevos mundos", afirmó el diseñador.
Pero no es tarea fácil convertir esos conceptos en un vehículo real, especialmente cuando se quiere ser lo más fiel posible al diseño original. Sin embargo, tanto Heyde como Seebers tuvieron claro que la clave de este desafío residía en las proporciones.
El trabajo tuvo que ser meticuloso para calcular la silueta del sportback, característica de Audi. Además, tuvieron que enfrentarse a uno de sus mayores obstáculos, la batería, el corazón de estos modelos. No se trata de un elemento cualquiera, sino de algo esencial en el rendimiento de cualquier coche eléctrico. Debido a esto, el modelo es más alto de lo que los diseñadores habían imaginado.
Lejos de comprometer el diseño, este imprevisto les abrió una nueva puerta para innovar, y decidieron crear inserciones en los faldones laterales que, además de disimular la altura adicional, añaden un nuevo elemento visual al coche cuando se observa de perfil. Un detalle que no solo está presente en este modelo, sino que también podemos encontrar en vehículos que actualmente están en el mercado, como el Q6 e-tron.
Lo más impresionante del diseño es su aerodinámica. Según palabras del propio Wolf Seebers, en la creación de este coche, la aerodinámica fue un factor fundamental, ya que influye significativamente en la eficiencia de la batería de los coches eléctricos. El resultado es un coche con un coeficiente de resistencia al viento de 0,21, el más bajo jamás creado por Audi.
Este logro no solo es resultado de la profesionalidad de estos dos trabajadores, sino también de su amistad de más de 20 años, que les ha permitido trabajar en perfecta sintonía, dando como resultado una obra de arte que pronto podremos ver en nuestras calles.
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