Por el bien de todos: cinco normas de circulación que los ciclistas también tienen que cumplir

El buen uso de las carreteras es cuestión de respeto y de comprensión entre los diferentes vehículos que circulan por nuestras vías...así como un cumplimiento estricto de las normas de circulación. Nadie puede saltarse las normas a su antojo en beneficio propio...porque las consecuencias pueden ser de todo menos buenas.

Uno de los elementos más delicados del "ecosistema vial" de nuestro país son los ciclistas, por lo que un estricto cumplimiento de las normas y un especial cuidado con ellos es fundamental para evitar situaciones comprometidas y peligrosas. Sin embargo, una de las quejas más comunes entre los automovilistas es la impunidad con la que los ciclistas se saltan las normas de circulación, sobre todo en terreno urbano. Sí, los ciclistas también están obligados a cumplir las normas...

Los ciclistas también tienen límite de alcoholemia. Así, la tasa de alcohol máxima es de 0.25 mg/litro de aire expirado, siendo susceptibles también de someterse a controles de alcoholemia por parte de las autoridades si así lo requieren. Por la noche, por ejemplo, los ciclistas están obligados a portar elementos reflectantes y su bicicleta tiene que estar equipada con luces blancas delante y rojas detrás.

Si existe un carril bici debidamente señalizado, el ciclista está obligado a circular por él y no por la calzada. De lo contrario, se le podría sancionar. También está terminantemente prohibido que los ciclistas circulen por vías públicas con auriculares puestos, siendo motivo de sanción si se le detecta utilizando la bicicleta con ellos puestos.

Además, es obligatorio que las bicicletas que circulen en vías públicas estén equipadas con freno tanto en loas ruedas delanteras como en las ruedas traseras. Como ves, son muchas las normas que los ciclistas tienen que cumplir, una normativa que por el bien de todos conviene tener presente en todo momento.