Conducir un coche superando el número legal de plazas homologadas puede salir así de caro

Una de las vías que tiene la Dirección General de Tráfico (DGT) para mantener al día nuestros conocimientos sobre el reglamento son las redes sociales. Ha sido, precisamente, en Twitter donde ha puesto el foco de atención en una práctica que se repite con demasiada frecuencia en verano: superar la capacidad de transporte de un vehículo. No hacemos referencia a la carga, sino a los ocupantes que en él viajan. Conducir un coche que lleva más personas de las permitidas puede salir así de caro.

Viajar superando el número legal de plazas homologadas que tiene el vehículo pone en peligro la seguridad de todas las personas que se encuentran en el interior del vehículo. El conductor pierde visibilidad y la integridad del resto está en riesgo porque habrá ocupantes que no irán protegidos con el cinturón de seguridad. A esto hay que añadir que, desde 2006, los niños cuentan igual que los adultos a la hora de determinar la ocupación del vehículo.

Infracción leve o grave

Teniendo en cuenta lo establecido en la normativa, llevar más personas de las autorizadas en la tarjeta de Inspección Técnica del Vehículo (ITV) puede ser una infracción leve o grave: todo depende del número de ocupantes que supere el límite.

Si no rebasan el 50% de las plazas homologadas del vehículo (es decir, si viajamos en un coche de cinco huecos con seis o siete personas) será leve. En este caso, el conductor (único responsable de la infracción) se enfrentará a una multa de 80 euros. Las cosas cambian cuando se sobrepasa el 50% del número máximo de asientos y llevamos con nosotros a ocho o más personas en un vehículo capacitado para transportar a cinco viajeros.

Estaremos, entonces, cometiendo una infracción grave que lleva aparejada una sanción económica y un par administrativas: según el Código de Circulación, la primera puede llegar a ser de 500 euros mientras que el resto se puede materializar en la pérdida de cuatro puntos en el carnet de conducir y en la retirada del permiso durante tres meses. A esto habría que añadir la inmediata inmovilización del vehículo.

Cuidado con el seguro

Para terminar es necesario recordar las consecuencias que esta práctica puede tener en caso de accidente. Más allá de los términos de seguridad que antes hemos tratado, afecta también a la cobertura de la póliza que tengamos contratada: ésta dejará de tener efecto si en el habitáculo hay más personas de las permitidas porque se está incumpliendo la ley. Por lo tanto, la compañía no se hará cargo de las consecuencias: reparaciones, desperfectos, posibles indemnizaciones… El titular del seguro y el conductor serán los encargados de responder ante todos los gastos.