Ni el coronavirus detiene los robos: el catalizador sigue siendo el preferido de los ladrones

A pesar del obligado aislamiento, los robos en los coches siguen produciéndose. La picaresca no entiende de pandemias por coronavirus y los delincuentes están aprovechando la restricción de nuestros movimientos para perpetrar estos hurtos. Y como siempre hay una pieza que sigue siendo la preferida de este tipo de ladrones: el catalizador. Un arreglo que puede llegar a costarnos hasta mil euros.

El catalizador es un componente del sistema de escape y su función pasa por modificar químicamente los gases de escape para reducir las emisiones contaminantes. Su ubicación es accesible y la composición de materiales es muy valiosa, un binomio que han convertido a este pieza en objeto de deseo para los ladrones.

Si el delincuente en cuestión tiene un mínimo conocimiento de mecánica, sólo tardará unos minutos en desmontar el catalizador. Por otro lado lo normal es que la estructura de un catalizador contenga cerámica y metales como platino, paladio o rodio. Esto hace que tanto la pieza como los citados minerales por separado estén bien cotizados en el mercado negro.

Sin embargo, no suelen actuar con tanta delicadeza y habitualmente cortan el escape por la zona más próxima al catalizador porque es una forma más rápida de perpetrar el robo. Los que, incluso, lo arrancan tirando con una cadena. Por lo tanto, tenemos que sumar la sustitución del catalizador (300-500 euros) al resto de piezas que se hayan llevado por delante o que hayan dañado durante el hurto. Una reparación que, en total, puede costarnos entre 1.000 y 1.500 euros.

¿Y el seguro del coche?

Hay compañías de seguros y pólizas que pueden cubrir este tipo de robos, sobre todo si tienes contratado un todo riesgo. Eso sí, estos casos son los menos y habitualmente suelen pagar, como máximo, el 80% del coste total. Otras aseguradoras no se hacen cargo si sólo ha sido el catalizador la víctima del hurto y en determinados casos pueden llegar a considerarlo siniestro si el vehículo tiene unos cuantos años y supera el valor venal.

Una última opción pasa por recurrir a un desguace para conseguir esta pieza de segunda mano y, evidentemente, más barata. No obstante vas a necesitar tener algo de suerte puesto que en estos lugares es complicado encontrar catalizadores porque ellos tampoco se libran de este tipo de robos.