Una buena postura al volante es tan importante como tener una actitud responsable, puesto que en caso de accidente podemos sufrir muchos daños si no vamos sentados correctamente. Esto también se aplica sobre el resto de los pasajeros, especialmente en el copiloto, quien tiene facilidades para recurrir a uno de los hábitos más peligrosos que recuerda la DGT: llevar los pies sobre el salpicadero. Y es que muchos pueden considerar que no es para tanto y que es por simple comodidad. Pero lo cierto es que en caso de accidente o frenada de emergencia podemos sufrir lesiones fatales no tanto por la fuerza del golpe, sino por llevar esa postura tan poco usual. Al menos en lo que a la forma natural de sentarnos se refiere, ya que sí que es bastante usual y frecuente en las carreteras españolas. Y es que la DGT detecta a cientos de vehículos en los que el pasajero viaja con los pies en el salpicadero, siendo captados, fundamentalmente, por sistemas de vigilancia aérea, tales como drones y helicópteros. Pero lo verdaderamente importante es que, en caso de frenada de emergencia, podemos sufrir lo que se conoce como efecto submarino si llevamos los pies sobre el salpicadero. Esto se debe a que el cinturón de seguridad funciona correctamente cuando llevamos una posición adecuada en el coche, de no hacerlo podemos sufrir dicho fenómeno y deslizarnos por debajo del mismo, generándonos muchas lesiones. Además, otro escenario sumamente peligroso es en caso de colisión, ya que bajo el salpicadero se esconde el airbag. Estos se despliegan con velocidad en busca de actuar lo más rápido posible. En caso de que eso sucediese y nos encontrásemos con los pies sobre el salpicadero, podríamos sufrir numerosas lesiones en piernas y rodillas, así como tener otro tipo de problemas al no ir sentados correctamente. A todo ello debemos sumarle el aspecto menos importante, o al menos frente a dos situaciones en las que llevar los pies sobre el salpicadero nos puede costar mucho. Y es que esta postura, al ser tan peligrosa, tiene multa. Concretamente, atenta contra el apartado 1 del Artículo 18 del Reglamento General de Circulación, y lo cual implica una sanción de 100 euros.