¿Dónde es mejor aparcar "mal" si no encuentras aparcamiento? De vados, multas y grúas va la cosa

Encontrar aparcamiento cerca de casa (incluso a varias manzanas) es un reto al que mucha gente se enfrenta a diario, y probablemente te suena si vives en una gran ciudad o no tienes una plaza de garaje en tu edificio. Ahora bien, ¿qué pasa cuando 'solo' tenemos que hacer una parada rápida?

Todos hemos aparcado en doble fila (quedándonos o no dentro del vehículo), hemos dejado el coche unos minutos en un vado, ocupando unos metros del paso de peatones o una plaza de minusválidos. Sabemos que está mal y que todas estas prácticas pueden costarnos una multa, pero ¿dónde es mejor aparcar "mal"?

Aparcar en doble fila es lo más común

Dejar el coche en doble fila unos minutos es la opción menos mala y todos lo hemos hecho alguna vez. Lo ideal es que permanezcas dentro del vehículo para moverlo si molesta u obstaculiza la circulación. Si no es así, al menos deberías estar atento.

Evidentemente, es mejor aparcar unos minutos en doble fila en calles anchas, con más de un carril para cada sentido o poco transitadas, porque el riesgo de molestar es más bajo. Las multas pueden ser de hasta 200 euros en cualquier caso, aunque muchas veces la Policía hace la vista gorda, a menos que vuelva a pasar por la misma calle y tu coche siga ahí.

En calles muy estrechas, con un solo carril para cada sentido o en zonas demasiado céntricas, es normal que los agentes sean más estrictos, así que hay un riesgo más alto de que tengas que pasar por el depósito municipal.

¿Qué pasa si aparcamos en vados?

¿Has dejado alguna vez el coche en un vado y crees que es mejor que en doble fila? Sí y no. Lógicamente, no es lo mismo el vado de una propiedad privada en una zona residencial que la salida de un garaje, un centro comercial o un edificio público. En los primeros es menos probable que tu coche moleste si lo dejas aparcado unos minutos, aunque tienes que saber que el propietario del vado tiene todo el derecho de llamar a la grúa si bloqueas el acceso. Y las multas pueden alcanzar también los 200 euros.

Imagina, por ejemplo, la calle de una urbanización con un único carril y coches aparcados a los dos lados. En ese caso, es mejor detenerte en un vado que hacerlo en doble fila, porque esto implica bloquear por completo el tráfico.

Si tienes que hacer una parada rápida en un vado, sea del tipo que sea, lo mejor es que no te bajes del coche o permanezcas a unos metros de él. No es legal, pero es menos probable que molestes en una zona residencial con poco tráfico que en una zona comercial o en un garaje compartido.

Ojo, eso sí, con la grúa. El servicio de grúa, y tener que ir a recoger el coche del depósito puede hacer que el proceso sea más costoso. Si tienes que elegir sí o sí entre una opción u otra, opta por aquella que no implique retirada con grúa. Por ejemplo, dejar el coche en una calle peatonal sin cortar el paso a nadie podría llevar a que un vecino llame a la Policía y te lleves la multa, pero difícilmente será retirado con grúa. En cambio, si vas a dejar el coche unas cuantas horas, un vado puede ser una mala idea, porque si un vecino llama a la Policía y lo tiene que retirar la grúa, la partida te puede salir cara.

Líneas amarillas, pasos de peatones y plazas de minusválidos

No está permitido aparcar en líneas amarillas, pero igual que hemos visto con los vados, hay zonas y zonas. Por ejemplo, en muchas calzadas es habitual ver líneas amarillas en zig-zag porque normalmente están reservadas para paradas de autobús o carga y descarga de mercancías. No aparques ni siquiera hagas una parada rápida aquí, porque estarás obstruyendo la circulación.

En cambio, es menos malo hacer una parada rápida en la línea amarilla de una calle residencial y menos transitada que no esté reservada para otro fin. Procura no hacerlo nunca en:

• Cambios de rasante.
• Curvas o esquinas que bloqueen la visibilidad.
• Zonas que dificulten el paso de peatones.

Tampoco ocupando total o parcialmente un paso de peatones ni en plazas de minusválidos. Hay muchas personas que aparcan en estas últimas sin la acreditación correspondiente y además de estar sancionado con multas de hasta 200 euros, estarás ocupando una plaza diseñada para facilitar la vida a alguien que de verdad lo necesita.

Como para todo en la vida, utiliza el sentido común. Todos podemos aparcar mal unos minutos en la vía pública, pero procura elegir la opción menos mala, la que no obstaculice la circulación ni tampoco perjudique al resto.

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