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El legendario piloto brasileño se enemistó con el público por un zumo de naranja

Emerson Fittipaldi y el desafío a la tradición láctea de la Indy 500

Las tradiciones son sagradas en Estados Unidos y si no, que se lo digan a 'Emmo', que sufrió la ira del público tras su último triunfo en Indianápolis.

-Emerson Fittipaldi

Emerson FittipaldiIndianapolis Motor Speedway

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Diez mil dólares por beber leche. ¿Quién diría que no? Ese es el premio que la Asociación Americana de Productos Lácteos entrega al ganador de las 500 millas de Indianápolis por promover la leche tras imponerse en la carrera. Se trata de una tradición que inició en 1936 cuando Louis Meyer pidió por tercera vez (lo había hecho en 1928 y 1933) un vaso de suero de mantequilla tras ganar la carrera y que quedó fijada veinte años más tarde como una parte ineludible de la histórica prueba. En 1981, Bobby Unser no bebió la leche a pesar de haber ganado al ser inicialmente sancionado y luego reinstaurado como vencedor… pero solo un piloto tomó la decisión de no beber leche (en cierta forma): Emerson Fittipaldi.

Emerson Fittipaldi ya había ganado las 500 millas de Indianápolis en 1989, así que era perfectamente consciente de la importancia de la imagen del vencedor de la prueba con su botella de leche. Desde entonces, al brasileño se le ocurrió una jugada que en su cabeza era espectacular. Fittipaldi era propietario de unas plantaciones de naranjas en su Brasil natal, así que se le ocurrió que si volvía a ganar la Indy 500, la imagen de su efigie y una botella de cristal transparente con un atractivo zumo de naranja con buen color sería perfecta para promocionar las ventas de su producto. Pero olvidó la obsesión estadounidense con las tradiciones.

Emerson Fittipaldi
Emerson Fittipaldi | Indianopolis Motor Speedway

Ante la atónita mirada del público, Fittipaldi disfrutó de un largo trago de zumo de naranja tras llevarse la victoria en la edición de 1993 tras una carrera en la que peleó con Nigel Mansell, otra leyenda de la Fórmula 1 a quien superó a falta de 15 vueltas para el final. Los abucheos al brasileño fueron espectaculares y a pesar de la sonrisa que mantenía ante las cámaras, el piloto era perfectamente consciente de la situación. Aun habiendo renunciado al premio de la Asociación Americana de Productos Lácteos (entonces era de 5.000 dólares, la mitad que hoy en día), el público no perdonaba la ofensa.

Fittipaldi estuvo rápido y justo después de terminar su momento de promoción con el zumo de naranja siguió con el tradicional trago de leche (así que técnicamente sí la bebió), pero el daño ya estaba hecho. Los abucheos siguieron una semana después en Milwaukee... lógico quizás por ser uno de los centros de la industria láctea norteamericana. Incluso en años posteriores, los aficionados han seguido con su propia tradición de seguir abucheando al pobre arrepentido piloto que ni disculpándose se salvó de recibir cartas amenazantes. Esta tradición de los aficionados aún se mantuvo en 2008 cuando estuvo en el Pace Car y hasta en visitas posteriores, aunque a día de hoy la situación parece haberse calmado.

Emerson Fittipaldi
Emerson Fittipaldi | Indianapolis Motor Speedway

Por cierto, que cada piloto participante en la Indy 500 tiene el derecho a elegir qué tipo de leche quiere en caso de llevarse la victoria. Esta elección se realiza en cuanto los 33 pilotos están fijados. Lógicamente, a un día de la disputa de las 500 millas de Indianápolis de 2019, la elección del tipo de leche es ya de dominio público y hay algunos detalles peculiares. La elección más popular es la de leche entera, con 21 pilotos que la favorecen entre los que están el hombre de la pole Simon Pagenaud o los antiguos ganadores Alexander Rossi, Hélio Castroneves, Scott Dixon o Ryan Hunter-Reay.

Mención especial a Ed Carpenter y James Hinchcliffe, que habrían elegido la mazada o suero de mantequilla en caso de ser posible (este tipo fue el originario de la tradición de la leche en 1936) aunque desafortunadamente para ellos no lo es. Solo un piloto de toda la parrilla eligió leche desnatada, un Marcus Ericsson que sigue el ejemplo de Fernando Alonso, que ya la pidió en 2017. Los pilotos restantes (entre los que se encuentra Oriol Servià) optaron por la ‘semi’ a excepción de un Will Power que no tiene ninguna preferencia en absoluto. Eso sí, para el ganador, prohibida cualquier bebida que no sea leche. Como tiene que ser.

Leche de la Indy 500
Leche de la Indy 500 | Indianapolis Motor Speedway

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