LLEGADA A EUROPA
Es la empresa que cambia la batería de tu coche en 2 minutos, y lanza su primer eléctrico "barato" en Europa
El Firefly de Nio llegará a Europa. Pero parece que la tecnología de intercambio de batería no lo acompañará.
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Si ya conoces el Firefly de NIO y sabes que en el segundo trimestre de 2025 se empezará a vender en Europa, seguramente te habrás llevado una alegría. Porque conoces sus cualidades, como sus baterías intercambiables, y lo barato que es. Pero hay una mala noticia. Estamos hablando de una marca china y su implantación en nuestro continente no será fácil. Viene con condicionantes que reducirán las características principales del Firefly.
Para empezar, quizá la más importante, su precio. En China destacaba por ser muy muy barato. Si lo trasladásemos a la moneda comunitaria europea, su precio sería inferior a 20.000 euros. Sin embargo, las unidades del Firefly que se vendan en nuestro continente serán gravadas con aranceles que pueden elevar su coste entre los 30.000 y los 35.000 euros.
Intercambio de batería
La subida de precio es un gran inconveniente, no cabe duda. Pero hay otro bastante contundente, y es que Firefly, al menos en principio, no podrá disponer de una de sus tecnologías más atractivas, las baterías intercambiables. En China, se puede acudir a uno de sus puntos de sustitución que se van extendiendo por Europa para que te cambien en solo dos minutos la batería usada por otra llena de energía. Y a continuar con el viaje.
No obstante, en Europa la red de estaciones de sustitución es inexistente y para extenderla primero necesitan firmar un acuerdo con CATL (Contemporary Amperex Technology Co. Limited), empresa de baterías encargada de instalar estos lugares de intercambio.
Cooperación con CATL
El fundador y CEO de NIO, William Li, afirmó durante el NIO y Firefly Day que “hay posibilidades de cooperación con CATL en la estandarización del intercambio de baterías”. En sus palabras queda claro que el Firefly llegará al mercado europeo antes de que se instalen estaciones de sustitución en el continente.
Por lo tanto, Firefly pierde sus cualidades como coche eléctrico, que es una de sus características que le puede diferenciar en el mercado. Aunque están buscando una solución, tal vez una batería con mayor autonomía. Tendrán que maximizar las alternativas para poder competir desde el primer día con otros modelos eléctricos y compactos ya establecidos en Europa como el Mini y el Smart.
Pero NIO sabe que envía el Firefly a la aventura europea con recortes en un primer momento, que espera solventar más temprano que tarde. Así que se trata de una apuesta a medio y largo plazo que requerirá paciencia y mucha mano izquierda para negociar aranceles más asequibles y el establecimiento de las estaciones de intercambio.
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