Una mujer que llevaba un bebé en la parte de atrás de su vehículo, ha intentado escapar de la Policía texana, llegando a circular a 160 km/h y de forma temeraria, poniendo en peligro tanto su vida como la del menor y los otros usuarios de la vía. La persecución no parecía cesar hasta que uno de los agentes consiguió lanzar una banda de clavos con la que pinchó uno de los neumáticos del coche de la fugitiva, pero esta aún así continuó la marcha. Tras conducir varios minutos más, en sentido contrario y esquivando todos los obstáculos que podía, finalmente se chocó con otro coche que circulaba delante de ella. Rápidamente bajó del automóvil recogiendo también al bebé que llevaba, para después salir corriendo por la carretera. El desenlace ocurrió cuando la mujer subió con su niño a otro coche y la policía lo alcanzó, desalojando a la propietaria del vehículo que también viajaba con una menor, y a la otra mujer que escapaba con el bebé, deteniéndola en el acto. Se le acusó de evadir el arresto, poseer sustancias prohibidas y poner en peligro a un niño. Según funcionarios del condado de Bexar, esta persona estaba bajo una orden de arresto por delitos graves antes de este suceso.