El "extra" de moda en los coches nuevos y que puede estropear tu móvil

La carga inalámbrica para teléfonos móviles es uno de los extras más solicitados por los conductores al comprar un coche nuevo. A primera vista, parece una solución perfecta para evitar cables y mantener el móvil cargado durante los trayectos. Sin embargo, este práctico accesorio puede ser más problemático de lo que parece, y en algunos casos, dañar la batería de tu móvil.

El problema principal radica en que muchos sistemas de carga inalámbrica en los coches no están optimizados para todas las marcas y modelos de teléfonos. Además, la carga inalámbrica genera más calor que la carga convencional, lo que, combinado con las altas temperaturas que pueden alcanzarse dentro de un coche, puede sobrecalentar el dispositivo. Este sobrecalentamiento, a largo plazo, afecta la batería, reduciendo su capacidad de carga y, en el peor de los casos, provocando daños permanentes.

Para evitar problemas, los expertos sugieren utilizar cargadores con cable que sean compatibles con el móvil y limitar el uso de la carga inalámbrica durante trayectos largos; ya que no se aconseja cargar el móvil durante más de 1 hora bajo esta tecnología. Aunque parece un extra conveniente, la carga inalámbrica no siempre es la mejor opción para el bienestar de tu dispositivo.

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