El grado de profesionalización de las bandas criminales es sorprendente, y la estructura jerárquica, extrategias, sinergias parecen más propias de una empresa que de un grupo de malhechores. En la última operación de la Guardia Civil contra una organización dedicada al robo de vehículos de alta gama, se detuvo a 8 personas, pero el número de personas implicadas es llamativa. Esta banda, vendía lo sustraido en otros países de Europa y del Norte de África, aunque el cabecilla residía en Palma. 'Prunariu-Novurania' es el nombre de una operación en la que los agentes de la Guardia Civil han realizado trece registros domiciliarios e inspeccionado siete talleres mecánicos de tres países ubicados en Mallorca, Málaga, Murcia, Alemania e Inglaterra, y se han recuperado un número no determinado de turismos, motocicletas y motos de agua. Este tipo de operaciones no se llevan a cabo de un día para otro, y de la que hablamos comenzó a finales de mayo a raíz de varios robos de vehículos de alta gama, y con las investigaciones se identificó a un grupo de personas, la mayoría con antecedentes policiales, que de manera coordinada podrían estar implicadas. Bajo 'pedido' El cabecilla de la banda, con domicilio en Palma, trabajaba bajo pedido, por lo que asignaba los robos y supervisaba la actividad de los demás integrantes de la red. Diversificación Por lo general, según ha explicado la Guardia Civil, sustraían turismos de alta gama, motocicletas, motos de agua y embarcaciones neumáticas, aunque también se dedicaban al despiece de vehículos para su venta y exportación a países de Europa y norte de África.Recursos humanos La organización contaba con el personal para el proceso completo: mecánicos para el despiece de los vehículos, conductores y transportistas que sacaban los vehículos de España en contenedores que eran embarcarlos en los puertos. Documentación Unos miembros de la banda se encargaban de la falsificación de la documentación de los vehículos, como el permiso de circulación, la ficha técnica y hasta placas de matrícula, y para ello, contaban con el apoyo de una gestoría de Palma. De esta manera conseguían dar una apariencia de legalidad a los vehículos previamente robados, algunos de ellos recogidos en diferentes depósitos municipales repartidos por la geografía nacional. Recogida en depósitos municipales En estos casos, la organización, tras personarse con oficios judiciales falsificados, lograba que se les hiciera entrega de los vehículos sin levantar sospecha. Posteriormente, tras falsificar la documentación de estos, efectuaban un traspaso administrativo a varias empresas pantalla de la organización, consiguiendo así cierta impunidad en sus acciones. Seguimiento del producto Otra forma de actuar consistía en localizar el vehículo a robar, y una vez seleccionado, vigilaban sus movimientos para conocer las costumbres diarias de su propietario y medidas de seguridad del lugar. Desguace rápido y venta por piezas En ocasiones, desmontaban los vehículos o embarcaciones robadas en una nave industrial de Mijas, en Málaga, donde l a organización disponía de las herramientas para realizar el desguace en menos de seis horas.Internacionalización Uno de los vehículos de alta gama recuperados, fue sustraído en la localidad de Frosinone (Italia), lo que, según la Guardia Civil, demuestra que los implicados en la estructura criminal investigada tenían un amplio radio de acción. Sinergias en el 'sector' Además, la organización también se dedicaba a la sustracción de motos de agua que posteriormente transportaba hasta Marruecos, para ser utilizadas por otras organizaciones relacionadas con el tráfico de hachís desde la costa marroquí hasta el sur de la Península. Esta organización contaba con otros miembros que alojaban los vehículos robados en distintas naves y talleres ubicados en Palma, desde donde eran exportados posteriormente. Fuente: AGENCIA EFE En Centímetros Cúbicos: , , ,