Este guiño a los sesenta es un proyecto hecho por encargo
El homenaje moderno al 'Breadvan' de Ferrari que no esperabas ver hoy
El Ferrari 250 GTS SWB de 1962 ha encontrado sucesor sobre la base de un Ferrari 550 Maranello donante del que apenas se mantiene el parabrisas delantero
Publicidad
- El nuevo etiquetado de neumáticos que llega en 2021: éstos son sus cambios
- Los 5 coches que más visitas al taller han acumulado en 2020 en España
- La DGT anuncia su unión a un proyecto para recoger tus datos mientras circulas
- ¿Sufres alguno de estos síntomas? La DGT te alerta de que debes dejar de conducir
- El parabrisas que nunca se empaña: no es ficción, existe y ya está disponible
A buen seguro que muchos panaderos firmarían poder realizar su reparto diario, aunque únicamente fuera por una jornada, al volante de un Ferrari, más aún si hablamos del icónico Ferrari 250 GT SWB “Breadvan” construido a principios de la década de los sesenta para competir en Le Mans. Cada vez que aparece este icónico modelo es prácticamente para anunciar el precio récord en una subasta o al ser incluido en una de esas listas en las que se recuerda los modelos del fabricante de Maranello más especiales y a su vez los más caros.
No suele ser habitual ver demasiados proyectos de modificación de un Ferrari, sin embargo, esto no echó atrás al carrocero holandés Niels van Roij Design. Su estudio no lo dudó cuando un coleccionista llamó a su puerta y le pidió un One-Off muy especial, una reinterpretación moderna del icónico Breadvan, aprovechando en esta ocasión la base de un Ferrari 550 Maranello al que se trasladaron algunos de los elementos más característicos de aquel proyecto.
Es por ello que, además de la icónica silueta, se han introducido algunos detalles que automáticamente trazan sus lazos de conexión con el modelo de mediados del Siglo XX, entre ellos el vidrio abovedado del capó a través del cual se puede ver el motor y que en el 250 GT original dejaban al descubierto los seis carburadores Weber. La caída del techo de forma totalmente vertical, detalles como las ópticas redondeadas de la parte trasera o los escapes cuádruples que sobresalen descaradamente de la carrocería, todos estos recursos de diseño han sido introducidos para hacer un guiño a la historia.
A pesar de ello, se han mantenido en parte intacta la esencia del 550 Maranello, algo que se evidencia en la parte delantera especialmente, así como las branquias laterales que marcaron al deportivo de los noventa. También la mecánica ha sido heredada de dicho modelo, por lo que si echamos un vistazo a sus entrañas encontraremos el motor V12 de 5.5 litros atmosférico capaz de entregar hasta 478 CV de potencia, asociado en este caso a una caja de cambios de seis velocidades manual.
En el habitáculo, se dan la mano la fibra de carbono y el aluminio, en contraste con un llamativo tono azul para la tapicería que también rinde homenaje al Breadvan y detalles en cuero negro.
Publicidad