Es hora de decir adiós al Fiat 500, que se muda a otra parte del mundo

El Fiat 500 que hemos conocido hasta ahora, producido en la planta de Stellantis en Tychy (Polonia), ha llegado a su fin, pues se ha dado por concluida la producción de unidades. Y es que el pequeño coche italiano es uno de los muchos que se dejarán de vender como coche nuevo al no cumplir con las nuevas y más severas normas de seguridad y ciberseguridad que deberán pasar todos los coches matriculados en la Unión Europea a partir del 7 de julio.

Pese a haber estado 17 años en el mercado sin grandes novedades y sobreviviendo sólo con un 1.0 de 70 CV (mismo motor que comparte con el Fiat Panda), en 2023 vendió más de 104.000 unidades solo en Europa, superando a vehículos más modernos. Su aspecto chic, su sencillez a la hora de manejarlo y su precio competitivo han sido algunas de sus principales bazas.

Lo que Stellantis ha decidido es muy sencillo: continuar la producción del 500 pero en su planta de Argelia, que estrenó a finales de 2023 y donde ya se producía tanto el 500 como la furgoneta Fiat Doblò. Es decir, que el Fiat 500seguirá estando en activo, sólo que se centrará en Oriente Medio y África, donde no tiene el problema de normativa de seguridad que tendría en la Unión Europea. Podría venderse durante un plazo de dos años más en caso de no superar las 1.500 unidades, pero estamos hablando de un coche de ventas en masa.

Y entonces, ¿nos quedamos sin Fiat 500? Primero, tenemos la versión eléctrica, el 500e presente desde 2020. Ahora bien, a partir de su plataforma Stellantis podría desarrollar una variante microhibridada que parta del ya conocido motor de 70 CV que, además de ser más grande que el 500 del que nos hemos encariñado, no tendría problemas con las más estrictas normativas de la Unión Europea.

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