El próximo Mazda MX-5 será electrificado

En Mazda ya están trabajando en el próximo MX-5, la que sería la quinta generación del popular roadster. El dilema al que se enfrentan las marcas de coches a la ahora de plantear el futuro de sus deportivos es importante, pues con unos planes de electrificación que no paran de avanzar, es inevitable el que este tipo de coches se pasen de un modo u otro a la electrificación. Por ello, desde fuentes de la marca nipona ya han adelantado que de un modo u otro, el futuro MX-5 tendrá que tener algún grado de electrificación, significando esto un cambio muy importante para la historia del modelo y su legión de fans.

Lo que se ha señalado desde la marca, es que la hoja de ruta del fabricante ya está planteada, y en ella toda la gama deberá buscar la forma de aumentar el protagonismo del motor eléctrico. De aquí a 2030 en Mazda se ha planteado una ofensiva donde tendrán cabida microhíbridos, híbridos completos, híbridos enchufables y coches 100% eléctricos como el actual MX-30. La visión de Mazda en este sentido también salpica al MX-5, pues con la obligatoriedad de reducir las emisiones de toda la marca, el deportivo tendrá que buscar la fórmula para adaptarse a estos nuevos tiempos.

Sin embargo, en Mazda tampoco han querido confirmar el lanzamiento de un MX-5 totalmente eléctrico, posicionándose más a favor de otras alternativas como la hibridación o los combustibles sintéticos, aprovechando además la nueva generación de motores y plataformas que tienen previsto lanzar en los próximos años. Hace tiempo que sabemos que Mazda trabaja en una nueva generación de motores Skyactiv, mecánicas que llevarán un paso más allá los resultados conseguidos hasta la fecha, pero que también podrán contar con hasta 6 cilindros y una mayor asistencia por parte de los sistemas híbridos que instalen.

De esta forma, la fórmula que parece más lógica en el Mazda MX-5 es la de estrenar una nueva generación de motores capaces de ofrecer mayor eficiencia gracias a la tecnología Skyactiv, pero que además se vean mejorados gracias a la nueva hornada de sistemas microhíbridos. De este modo, combinando ambas ideas es posible imaginar un MX-5 NE capaz de mantenerse fiel a su espíritu, haciéndolo además con un menor impacto en cuanto a emisiones y sin comprometer su peso por culpa de una hibridación completa donde las baterías añadirían un importante lastre.